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Unión Europea

Theresa May: «Retrasar el Brexit no es una opción»

Las negociaciones para la salida del Brexit alcanzan su punto crítico hoy en la cumbre de Salzburgo

La primera ministra británica, Theresa May, a su llegada a Salzburgo. Foto: Ap
La primera ministra británica, Theresa May, a su llegada a Salzburgo. Foto: Aplarazon

Theresa May se niega en redondo a ceder a la presiones que está recibiendo para dilatar en el tiempo la salida de Reino Unido de la Unión Europea, prevista para el 29 de marzo de 2019.

Theresa May se niega en redondo a ceder a la presiones que está recibiendo para dilatar en el tiempo la salida de Reino Unido de la Unión Europea, prevista para el 29 de marzo de 2019. Si Bruselas no cierra un acuerdo con Londres habrá un Brexit duro mal que le pese a ambas partes. La sugerencia de que se retrasase la fecha de salida vino del primer ministro escocés Nicola Sturgeon y May aprovechó la ocasión que le brindaban para aumentar la presión del lado europeo de la mesa de negociaciones que teme las consecuencias de una salida no pactada del Reino Unido de un mercado común en el que lleva insertado décadas.

“Todos reconocemos que el tiempo apremia pero extender o retrasar estas negociaciones no es una opción”, dijo la “premier” durante su discurso en la cena de trabajo que los jefes de Gobierno de los aun 28 celebraron en Salzburgo. May mantendrá hoy dos cruciales reuniones con el presidente de Irlanda, Leo Varadkar, y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk pero avisó: “La idea de que yo pueda estar de acuerdo con una separación legal entre dos territorios aduaneros en Reino Unido no es creíble”.

Tres son las prioridades expuestas por May durante la cumbre: mantener los lazos económicos, asegurar que las promesas realizadas a Irlanda del Norte se mantienen y que las relaciones de seguridad y defensa para hacer frente a amenazas comunes a ambos lados del Canal de la Mancha no se vean afectadas por el Brexit. En los pasillos de cumbre se rumorea que Reino Unido pondrá hoy encima de la mesa nuevas ideas para efectuar controles fronterizos en Irlanda que desbloqueen el dialogo. El anfitrión austriaco Sebastian Kurz, a su llegada a este segundo día de cumbre en Salzburgo, quiso poner al mal tiempo buena cara y dijo que “más allá de declaraciones altisonantes a los medios de comunicación, creo que ambas partes son muy conscientes de que solo se llegará a una solución si nos movemos el uno hacia el otro para converger”.