Defensa

Tienen más de 50 años, pero están listos para el combate: Trump crea un "super escuadrón" con aviones F-16

Estados Unidos reubica su capacidad aérea en Corea del Sur, acercando cazas F-16 a la frontera norcoreana para una nueva fase de pruebas

Dos cazas F-16 estadounidenses sobrevuelan el espacio aéreo de Polonia
Dos cazas F-16 estadounidenses sobrevuelan el espacio aéreo de Polonia GRZEGORZ MICHALOWSKIAgencia EFE

La Fuerza Aérea de Estados Unidos ha comenzado a trasladar aviones de combate F-16 Fighting Falcon desde la Base Aérea de Kunsan a la Base Aérea de Osan, en Corea del Sur.

Este movimiento logístico, iniciado el pasado 31 de julio, acerca sustancialmente las operaciones aéreas estadounidenses a la frontera con Corea del Norte, dado que la Base de Osan se encuentra aproximadamente a 129 kilómetros más cerca del límite fronterizo con el régimen de Pyongyang. Los F-16 siguen siendo muy eficientes, e incluso se envían inoperativos a Ucrania.

Esta reubicación forma parte de la preparación para la segunda fase de una iniciativa conocida como la "prueba del super escuadrón" del Ejército del Aire estadounidense. La primera etapa de este ejercicio dio comienzo en octubre del año pasado, implicando el despliegue de nueve F-16 y 150 militares en la Base de Osan, en un esfuerzo por consolidar el poder de combate aéreo y evaluar capacidades operativas.

Pruebas de calado para la capacidad operativa

La segunda fase de esta prueba, cuya aprobación se obtuvo en abril por parte del jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea, dará comienzo el próximo mes de octubre. Para ello, se prevé la transferencia temporal de un total de 31 F-16 y cerca de 1.000 militares a Osan a lo largo de este verano, tal y como recoge el medio Defensenews.

El propósito de esta maniobra es doble. Por un lado, busca consolidar la capacidad de combate aéreo y, por otro, evaluar en profundidad los sistemas de logística, mantenimiento y recursos humanos. Con ello, se espera determinar si un escuadrón más grande y consolidado en Osan puede generar una mayor potencia de combate y operar de manera más eficiente, según ha explicado el capitán Bryce Hughes, del Grupo de Mantenimiento número 51.

Aunque Kunsan mantendrá su papel como centro neurálgico para las fuerzas aéreas estadounidenses en Corea del Sur, la principal expectativa del traslado a Osan es proporcionar una defensa más robusta frente a las amenazas norcoreanas, cuyo régimen ha intensificado su beligerancia. El coronel Peter Kasarskis, comandante del 8º Ala de Caza, ha afirmado que este cambio se afrontará con la misma mentalidad de combate que caracteriza a su unidad.

La 51ª Ala de Caza, que hereda una histórica tradición desde la Guerra de Corea, mantiene una postura de "luchar esta noche" ("Fight Tonight") para la defensa de la República de Corea. Durante el periodo de pruebas, esta unidad expandirá sus ejercicios de entrenamiento conjuntos con la Fuerza Aérea de la República de Corea, buscando maximizar sus capacidades de preparación para el combate y afianzar su liderazgo en la prueba del "super escuadrón".