Trump elige a la fiel Pam Bondi como fiscal general tras la salida de Gaetz entre controversias

El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha designado a la exfiscal general de Florida, Pam Bondi, como su candidata para liderar el Departamento de Justicia. La elección se produjo pocas horas después de que el excongresista Matt Gaetz retirara su candidatura para el puesto.

“Durante demasiado tiempo, el Departamento de Justicia partidista ha sido usado como arma contra mí y otros republicanos. ¡Esto se acabó! Pam reorientará el DOJ hacia su propósito original: luchar contra el crimen y hacer que Estados Unidos sea seguro de nuevo. Conozco a Pam desde hace años; es inteligente, fuerte y una luchadora de América Primero que hará un trabajo increíble”, escribió Trump en su red social Truth Social.

La decisión de Trump refuerza su tendencia de elegir figuras que lo han apoyado en momentos clave. Bondi desempeñó un papel destacado como asesora principal en su equipo de defensa durante el primer juicio político, labor que asumió tras dejar temporalmente Ballard Partners, firma a la que regresó más tarde.

Además, Bondi acompañó a Trump en su juicio por el caso de dinero secreto en Nueva York, donde fue condenado en mayo por 34 delitos graves. En una reciente entrevista, Bondi calificó al fiscal especial Jack Smith y a otros fiscales que investigan a Trump como “horribles” y afirmó que usan el sistema legal como arma contra él.

Bondi ejerció como fiscal general de Florida entre 2011 y 2019, durante el mandato del entonces gobernador Rick Scott. Durante ese periodo, se destacó por oponerse a políticas de la era Obama, como el Affordable Care Act, y por defender la prohibición estatal del matrimonio entre personas del mismo sexo.

También se conoce porque durante la primera administración de Trump trabajó en una suerte de comisión de la Casa Blanca contra el tráfico de drogas, un tema que parece ser uno de los más cercanos a su causa y experiencia legal, de acuerdo con fuentes que han seguido su trayectoria pública.

Actualmente, lidera el Centro de Litigación del Instituto de Políticas América Primero y sigue vinculada a Ballard Partners, firma donde trabaja Susie Wiles, próxima jefa de gabinete de Trump.

Bondi reemplaza a Gaetz, cuya nominación como fiscal general generó fuertes críticas. El excongresista fue investigado por el Departamento de Justicia en un caso de tráfico sexual que incluía acusaciones relacionadas con una menor. Aunque no se presentaron cargos, su candidatura fue considerada una distracción para el equipo de transición.

La nominación de Bondi fue bien recibida por senadores republicanos. Lindsey Graham, quien presidirá el Comité Judicial del Senado, aseguró que será confirmada rápidamente. “Nombrar a Pam Bondi como fiscal general es un jonrón, un touchdown, un hole in one”, escribió Graham en X. Otros senadores, como Eric Schmitt, celebraron su elección porque la nominación va en línea con un pedido que ya habían hecho los más cercanos a Trump: “no deben bloquearle todos los nombramientos porque el presidente se molestaría”, había dicho la representante Marjorie Taylor Green en días recientes.

Sin embargo, Bondi no está exenta de polémicas. Apoyó las afirmaciones infundadas de fraude electoral de Trump en 2020 y fue acusada de aceptar una donación de 25.000 dólares de Trump en 2013 mientras evaluaba demandas contra Trump University. También se disculpó por pedir que se retrasara la ejecución de un preso porque coincidía con un evento de recaudación de fondos.

Pese a ello, Bondi podría ser una opción más aceptable para el Senado, que debe abordar otras nominaciones controvertidas como la de Pete Hegseth para Defensa y Tulsi Gabbard para Inteligencia Nacional.