Guerra comercial

Turquía restringe el comercio con Israel hasta que haya un alto el fuego en Gaza

Ankara y Jerusalén rompieron relaciones diplomáticas en octubre, pero el comercio no se había visto afectado

El Gobierno turco anunció ayer que restringirá el comercio con Israel -en concreto 54 productos— hasta que no se produzca un alto el fuego en la franja de Gaza. Según una nota del Ministerio de Comercio turco difundida en las redes sociales, “la decisión seguirá en vigor hasta que Israel, según sus obligaciones por el derecho internacional, declare un alto el fuego inmediato y permita un flujo adecuado e ininterrumpido de ayuda humanitaria en Gaza”.

Entre los productos que Turquía dejará de vender a Israel según el comunicado difundido por el Gobierno turco figuran el acero, el combustible de aviones, el cemento, el aluminio, los fertilizantes y los materiales de construcción. Las exportaciones turcas a Israel alcanzaron un valor de 5.430 millones de dólares el año pasado, según el organismo estatal de estadísticas turco. En 2022, Israel fue el décimo cliente de Turquía.

La medida se produjo un día después de que Ankara hiciera público que Israel ha bloqueado su tentativa de hacer entrega de ayuda aérea en Gaza. El lunes el ministro de Exteriores, Hakan Fidan, había anunciado ya represalias contra Tel Aviv asegurando que se llevarían a cabo “paso a paso” y “sin retraso”.

Como no podía ser de otra manera, el veto comercial a Israel cuenta con el respaldo del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, según el propio jefe de la diplomacia turca. “Gaza ha permanecido esn nuestros corazones desde el siete de octubre y se ha convertido en la herida sangrante de la consciencia de toda la humanidad”, aseguró, por su parte, el mandatario turco ayer en un mensaje emitido con motivo del Eid al-Fitr- la fiesta que marca el final del mes sagrado de Ramadán. “Continuaremos nuestro apoyo hasta que el baño de sangre en Gaza se detenga y nuestros hermanos palestinos logren un Estado libre con Jerusalén Oriental como capital”, zanjó el líder del AKP.

Además, la medida adoptada por las autoridades turcas se produce en medio de una creciente presión social contra Israel en el país. No en vano, el sábado pasado la Policía turca detuvo en Estambul a un pequeño grupo de activistas propalestinos que exigieron al Gobierno que rompiera relaciones comerciales con Israel en la céntrica plaza de Taksim.

El anuncio de Ankara se produce también poco más de una semana después de la derrota de la formación del presidente Recep Tayyip Erdogan, el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), frente a la oposición secular y socialdemócrata del Partido Democrático del Pueblo (CHP) en las elecciones municipales turcas. Un varapalo electoral, reflejo de un creciente descontento social respecto a la acción de gobierno, sobre el que el veterano líder islamista trata de desviar la atención.

La respuesta de Israel al veto turco no ha tardado en producirse. Tel Aviv ha acusado al Gobierno de Erdogan de no respetar los acuerdos comerciales firmados entre los dos países y ha amenazado con pedir a Estados Unidos que dejen de invertir en Turquía. Desde el Ministerio israelí de Exteriores denunciaba que Turquía “haya violado de manera unilateral los acuerdos con Israel” y anunciaba “la adopción de las medidas necesarias contra ello”.

Las relaciones entre Israel y Turquía se han deteriorado de manera acusada desde que comenzara la guerra de las Fuerzas de Defensa contra Hamás en Gaza después de años de paulatina normalización -que habían culminado con el restablecimiento de embajadores en agosto de 2022.

No en vano, el propio Erdogan llegó a calificar a Israel de “Estado terrorista” el pasado 15 de noviembre. Entonces, las autoridades turcas llamaron a consultas a su embajador en Tel Aviv. Israel había retirado a finales de octubre a todo su personal diplomático, incluida su embajadora, de Ankara. El mes pasado, Netanyahu acusó a Erdogan de apoyar a “asesinos y violadores de la organización terrorista Hamás”. El mandatario turco, que ganó las elecciones presidenciales en mayo de 2023 y anunció recientemente que no participará en ningún proceso electivo más, ha defendido públicamente a Hamás, al que ha definido como “grupo de liberación”.