Guerra en Ucrania

Ucrania asesta un duro golpe a la aviación rusa con el derribo de un avión de reconocimiento Beriev A-50

El jefe del Estado Mayor del Ejército, Valeri Zaluzhni, presume de haber destruido en la misma acción un puesto de control aéreo Il-22

«Los militares de la Fuerza Aérea de Ucrania han destruido un avión enemigo A-50 de detección de radares y un puesto de control aéreo Il-22», presumió en redes sociales el jefe del Estado Mayor del Ejército, Valeri Zaluzhni.

«Gracias a la Fuerza Aérea por una operación excelentemente planeada y ejecutada en la región de Azov», escribió el líder militar, que no precisó el método que utilizaron sus tropas ni el lugar exacto donde se produjo el derribo, aunque adjuntó un vídeo en su cuenta de Telegram en el que se aprecia cómo desaparecen las aeronaves del radar sobre el mar de Azov.

El A-50 Beriev es un avión de alerta temprana y control. Está equipado con un gran radar que puede seguir simultáneamente 150 objetivos en un radio de 230 kilómetros e incluso detectar objetivos aéreos a 650 kilómetros de distancia. Cuenta con una tripulación de 15 personas. Las Fuerzas Aéreas rusas disponen de una flota de nueve aparatos de este tipo.

El Il-22 es un bombardero cuatrimotor reconvertido en un puesto de mando aerotransportado. Sirve para supervisar las operaciones militares y retransmitir señales de radio a las tropas estacionadas en el frente. Las fuerzas aéreas rusas dispondrían de una docena de aviones de este tipo, según las estimaciones.

Los derribos han supuesto un revés significativo para la aviación rusa. Uno de los golpes más importantes desde el inicio de la invasión hace casi dos años por las características de las aeronaves, señalan los analistas.

Rusia cuenta desde el principio de la guerra con una clara superioridad aérea, un factor que le permite golpear toda la geografía nacional ucraniana. El Ejército ucraniano ha logrado abatir aviones enemigos con su artillería y en combates aéreos, pero también en el marco de sonadas operaciones de sabotaje contra aeródromos en territorio ruso, incluido la anexionada península ucraniana de Crimea.

Los blogueros de guerra rusos afirmaron sin pruebas que habían sido alcanzadas por fuego amigo y que el Il-22 solo había sido dañado. El puesto de control aéreo habría sido alcanzado sobre el mar de Azov, por lo que tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en la ciudad rusa de Anapa, según informó la agencia de noticias RBC-Ukraine. Aunque más tarde el portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana, Yuri Ignat, ha publicado una imagen en su perfil de Facebook del Il-22 ruso que habría sido alcanzado. «No tiene posibilidad de reparación», celebró.

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo no tener de información al respecto, según la agencia estatal de noticias TASS. «Se trata de un tema que concierne al avance de la operación militar especial», ha dicho antes de recomendar a los medios de comunicación que consultaran al Ministerio de Defensa.