Un boicot para tumbar a Capriles

¿Cuántas irregularidades hace falta contabilizar para anular unas elecciones? En los comicios celebrados este domingo se señalaron más de 3.200 incidencias, según han reconocido algunos de los observadores internacionales que estuvieron el 14-A en Venezuela. Coacción al voto, proselitismo, destrucción de papeletas, intentos de abrir las mesas, votaciones fuera de horarios y un sinfín de episodios turbios que empañaron la jornada.

A pocas horas de que se conocieran los resultados de las elecciones presidenciales en Venezuela, el candidato opositor al oficialismo, Henrique Capriles, ya denunciaba a través de Twitter un supuesto fraude por parte del Gobierno que dirige Nicolás Maduro en los sufragios. «Alertamos al país y al mundo la intención de querer cambiar la voluntad expresada por el Pueblo! Hacer RT a este mensaje», escribió en su cuenta de Twitter. «Exigimos a la rectora Tibisay Lucena el cierre total de las mesas de votación, están tratando de votar con mesas cerradas ¡Hacer RT!», escribió Capriles en otro tuit.

Votar por los discapacitados

Hacia las 22:30 horas GMT, las mesas electorales comenzaron a cerrar y empezaron a surgir todo tipo de denuncias de irregularidades en algunos centros por parte de sectores de la oposición. Incluso la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, confirmó la existencia de irregularidades durante la realización de las elecciones. «Hemos recibido denuncias y hemos actuado de inmediato. Es el momento de los electores, le hacemos un llamamiento a las organizaciones políticas, especialmente a los equipos de campaña, no se puede hacer ningún tipo de propaganda electoral», indicó la autoridad. En cuanto al voto asistido, señaló que contabilizan cinco casos irregulares en el estado Zulia. «Hacemos un llamamiento público a las organizaciones políticas para que les digan a sus seguidores que no hagan este tipo de prácticas», expresó. Precisó que en el estado Vargas también se detuvo a una persona por delito electoral. Dijo además que el organismo constató varios casos de destrucción del material electoral. Según Lucena, existen cuatro casos de personas que se han «comido» el comprobante del voto. «Eso no se puede hacer, eso es delito electoral», dijo la funcionaria.En paralelo han existido denuncias del equipo del candidato opositor, Henrique Capriles, sobre irregularidades en el proceso. El director general del comando opositor, Carlos Ocariz, dijo ayer a LA RAZÓN que «no se permitirán irregularidades de todo tipo, como las que se están registrando». El dirigente detalló que «se ha usado el voto asistido para amedrentar» a los ciudadanos, en referencia a los votantes que son acompañados por otra persona para sufragar, incluyendo casos de discapacitados.

Además, como señala Jose Vicente Haro, profesor de Derecho Costitucional en la Universidad Católica Andrés Bello de Caracas, se ha producido una completa «violación del Plan República», según la cual los militares estaban encargados de vigilar el transcurso y la transparencia de las elecciones. «He podido comprobar como los militares explicaban a los ciudadanos, especialmente a los que tenían discapacidades o algún impedimento, cómo votar por Maduro o llevándolos directamente a las urnas». Haro asegura que «está clara» la directriz que ha seguido el Ejército: «Hacer todo aquello que fuese posible para favorecer al candidato oficialista, Nicolás Maduro». El propio Ejército, señala el profesor, estaba «obligado» a votar por el candidato oficialista, e incluso algunos, una vez cerrado el proceso, «han podido votar en varias ocasiones con carnés de identidad falsos».