Siria

Un espía robó los calzoncillos a Bagdadi para confirmar su ADN

Las Fuerzas Democráticas Sirias aseguran que una de sus fuentes le cogió la ropa interior al líder de Estado Islámico para probar su identidad

Imagen de Bagdadi durante su primera aparición pública, en 2014/ Europa Press
Imagen de Bagdadi durante su primera aparición pública, en 2014/ Europa Presslarazon

Las Fuerzas Democráticas Sirias aseguran que una de sus fuentes le cogió la ropa interior al líder de Estado Islámico para probar su identidad

Las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) jugaron un papel esencial en la “operación Kayla Mueller”, el operativo militar que terminó con el líder del grupo yihadista Estado Islámico, el autodenominado “califa” Abu Bakr al Bagdadi. Uno de sus altos cargos, Polat Can, ha narrado que sus fuentes fueron clave en la localización y futura incursión militar de Estados Unidos.

“Gracias a nuestras propias fuentes, logramos confirmar que Al Bagdadi se había desplazado de la zona de Al Dashisha, en Deir el Zor, hasta Idlib”, anunció ayer Can, a través de sus redes sociales. “Desde el 15 de mayo, hemos estado trabajando de manera conjunta con la CIA para encontrar el rastro de Bagdadi y vigilarlo de cerca”, añadió el comandante kurdosirio.

Asimismo, Can contó que “una de nuestras fuentes fue capaz de localizar la casa en la que Bagdadi se escondía”. El comandante explica que el líder del Estado Islámico se cambiaba de residencia muy a menudo. “Estaba a punto de reubicarse en un nuevo hogar en Yarabulus”.

Por lo que “nuestra propia fuente, que fue capaz de llegar a Bagdadi, se llevó la ropa interior de Bagdadi para llevar a cabo un test de ADN y asegurarse (100%) que la persona en cuestión era el propio Bagdadi”.

Hace más de un mes, se tomó la decisión de eliminar a Bagdadi”, asevera el alto cargo de las SDF. “Aun así, la retirada de Estados Unidos y la invasión turca propiciaron que nosotros frenásemos nuestras operaciones especiales, incluida la de búsqueda de Bagdadi”. Es más, el kurdosirio hace hincapié en que “la invasión turca causó un retraso en la operación”.

El comandante de las Fuerzas Democráticas Sirias insiste en que “toda la inteligencia y el acceso a Bagdadi, así como la identificación de su localización, fue resultado de nuestro propio trabajo”. Y es que en opinión de Can “nuestra fuente de inteligencia estaba involucrada en enviarnos las coordinadas, dirigir la operación lanzada desde el aire, participar y hacer que la operación fuera un éxito hasta el último minuto”.

Can manifiesta que todos los grupos armados y elementos que rodeaban el pueblo de Barisha” eran terroristas del Daesh (Estado Islámico), operando bajo diversos nombres”. “En la operación aérea, todos sus puestos y posiciones militares fueron alcanzadas”.

Por último, el comandante cuenta que el terrorista Abu al Hassan tenía como misión especial ir a Yarabulus para asegurar la transferencia de Bagdadi a su nuevo hogar. Había un plan B, que consistía en poner como objetivo la nueva casa de Bagdadi de haberse movido antes del ataque en Barisha. “Abu al Hassan estaba siendo vigilado muy de cerca por la inteligencia de las SDF”.

Con todo, el presidente de EE UU, Donald Trump, hace de menos a las fuerzas kurdas (a las que ha abandonado en la frontera con Turquía en el noreste de Siria) y limita su papel. Los kurdos nos prestaron información “útil” pero no tuvieron “ningún papel militar”, señaló Trump durante la confirmación de la muerte de Bagdadi el domingo.