Una lección de unidad frente al enemigo

¿Sin la victoria aliada en Normandía habría cambiado el curso de la historia?

–La apertura del frente de Normandía fue clave porque liberó a una gran cantidad de fuerzas alemanas –en torno a 300.000 soldados– que estaban acosando a los ejércitos rusos, que ya estaban triunfando sobre los alemanes a costa de un gran derroche de sangre.

¿Qué enseñanza pueden extraer los actuales líderes mundiales del Día D?

–Aquella era una alianza contra natura, ideológicamente imposible. Fue la gran batalla de la conjunción de fuerzas capitalistas y comunistas unidas frente al enemigo común del nazismo. El espíritu de alianza que imperó entonces debería recuperarse para hacer frente a los grandes desafíos a los que se enfrenta el mundo.

Los veteranos deberían ser hoy los protagonistas de los actos.

–Así es. Quedan pocos y rondan los noventa años. Son la memoria viva de un día histórico. Si no hubieran ganado esa batalla, la guerra se habría extendido al menos dos años más.

Hace 70 años se derrotó a los nazis, pero hoy vemos el resurgir de partidos neonazis.

–A estas alturas, hablar de nazismo está fuera de lugar a pesar del surgimiento de esos partidos, porque no tienen ninguna opción.

* Historiador. Autor del libro «El último

día de Adolf Hitler»