Bruselas sopesa revisar sus fondos a Palestina, pero sin tocar la ayuda humanitaria

La Comisión Europea decidió este lunes comenzar una “revisión urgente” sobre la asistencia financiera que recibe Palestina, en respuesta a los ataques perpetrados por Hamás este pasado fin de semana, después de que algunos países europeos como Alemania y Austria decidieran congelar las ayudas.

Aunque en un primer momento el comisario de Vecindad, Oliver Varhely, anunció la suspensión inmediata de los fondos por valor de 700 millones de euros, la quejas de algunas capitales, entre ellas Madrid, hicieron que se produjera una matización posterior. En un comunicado, el Ejecutivo comunitario aclaró que el objetivo de esta revisión consiste en “asegurar que ningún fondo europeo permite indirectamente que ninguna organización lleve a cabo ataques contra Israel”.

En ese sentido, la Comisión Europea también aclaró que esta revisión tiene como objetivo analizar si los programas en apoyo a la población palestina y a la Autoridad Palestina “necesitan ser ajustados”. En todo caso, Bruselas explicó que esta posible suspensión no afectará al mecanismo de protección civil ni a la ayuda humanitaria. Mientras tiene lugar este análisis, la Comisión Europea asegura que no hay prevista ninguna nueva transferencia, por lo que no tiene sentido hablar de suspensión de fondos como tal.

Unas palabras posteriores que contradicen el mensaje anterior Oliver Varhelyi. “Todas las nuevas propuestas presupuestarias, incluida la de 2023, aplazadas hasta nuevo aviso y haremos una evaluación exhaustiva de toda la cartera”, había asegurado el comisario húngaro.

Poco después de este anuncio, el ministro español de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, mantuvo una conversación telefónica con el comisario para trasladarle su desacuerdo con esta decisión que no conocían los ministros de Exteriores.

La Autoridad Palestina recibe financiación por parte de la UE para garantizar el acceso a servicios básicos como el agua y la sanidad, pero según había explicado la portavoz de Vecindad, Ana Pisonero, esto no implica que la UE esté sufragando, ya se sea de manera directa o indirecta a Hamás, que controla la franja de Gaza. Según un mensaje en redes sociales del máximo representante de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, la suspensión de los fondos “hubiese dañado los intereses de la UE en la región y sólo hubiese alentado el terrorismo” al castigar a toda la población palestina.

Desde 2020 a 2024, la financiación europea para Palestina asciende a 1.177 millones de euros dentro de las ayudas de cooperación, a lo que hay que sumar 25 millones de ayuda humanitaria y 80 de apoyo a los refugiados palestinos en 2022. En total, las partidas europeas están cifradas en 300 millones de euros anuales.

Tras conocerse el ataque de Hamás lanzado contra Israel el pasado sábado, la UE reconoció el derecho de Israel a defenderse y en los últimos días la diplomacia europea ha mantenido diversos contactos con actores en la región, con el objetivo de calmar las aguas y analizar el escenario.

De hecho, Borrell convocó una reunión de urgencia de los ministros de Asuntos Exteriores de los Veintisiete para este martes en aras de analizar la situación. Será un formato híbrido ya que Borrell se encuentra en Mascate (Omán) donde ya estaba prevista una reunión de los ministros de Asuntos Exteriores de la UE y del Consejo de Cooperación del Golfo. Mientras algunos asistentes acudirán de manera presencial otros lo harán por teleconferencia. Esta cita congregará a los ministros de Exteriores de Arabia Saudí Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Kuwait y Qatar.

“Tenemos muchos desafíos comunes que requieren una estrecha cooperación incluidas las trágicas consecuencias del ataque de Hamás contra Israel. Necesitamos seguir trabajando juntos por la paz”, aseguró Borrell en sus redes sociales. El jefe de la diplomacia europea también ha condenado que Hamás haya secuestrado a civiles y los esté utilizando como rehenes ya que esto supone “una flagrante violación de todas las leyes ”y ha prometido hacer “todo lo posible para contribuir a su libertad”.

En la última reunión celebrada entre la diplomacia europea y representantes de Arabia Saudí, Jordania ,Egipto y la Liga Árabe en los márgenes de la Asamblea de Naciones Unidas en el mes de septiembre, Borrell siguió defendiendo que la única solución para poner fin al conflicto árabe-israelí pasa por dos estados. Aunque tras este encuentro las declaraciones de los asistentes estaban marcadas por un cierto optimismo, el máximo representante de la diplomacia comunitaria alertó del agravamiento de la situación.

La UE también ha condenado en numerosas ocasiones la política israelí de aumentar los asentamientos que incluso han afectado a proyectos financiados por la UE. Las cancillerías europeas siempre se han mostrado en desacuerdo por la ocupación israelí de los territorios palestinos realizada en 1967 tras la Guerra de los Seis Días y solo reconocerá estas nuevas fronteras si las dos partes lo hacen.