Elecciones en Francia

Valls acusa a su oponente socialista de ser de Podemos

En la primera vuelta del pasado domingo, Hamon consiguió el 36 % de los votos, mientras que Valls se quedó con el 31 %

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, posa junto al diputado francés, Benoït Hamon en París en 2015..
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, posa junto al diputado francés, Benoït Hamon en París en 2015..larazon

El ex primer ministro francés Manuel Valls criticó hoy a su rival en las primarias de los socialistas franceses, Benoît Hamon, por su proximidad con el partido español de izquierda Podemos y con el líder de los laboristas británicos, Jeremy Corbin.

El ex primer ministro francés Manuel Valls criticó hoy a su rival en las primarias de los socialistas franceses, Benoît Hamon, por su proximidad con el partido español de izquierda Podemos y con el líder de los laboristas británicos, Jeremy Corbin.

En una entrevista a la emisora “France Info” a cinco días de la elección que determinará quién de los dos será el candidato socialista para las elecciones presidenciales de abril-mayo, Valls reprochó a Hamon que reivindique a Podemos, “que impide el ejercicio del poder en España”, y a Corbyn, que simboliza “la oposición para siempre en Gran Bretaña”.

El que fuera primer ministro de François Hollande, hasta que dimitió en diciembre para presentarse a estas primarias, siguió centrando sus ataques a su rival, que parte claramente como favorito, en un programa que a su juicio “es irrealizable”.

Así, atacó una vez más el proyecto de Hamon de crear un ingreso universal de 800 euros para toda persona mayor de edad al margen de su situación social, del que dijo que supondría un costo de más de 350.000 millones de euros para las arcas públicas que obligaría a aumentar de forma significativa los impuestos.

Frente a eso, Valls defendió la fusión de los subsidios mínimos existentes para que sean más eficaces, pero dirigidos únicamente a personas con problemas de inserción laboral y bajos ingresos.

Igualmente denunció que Hamon pretenda reducir el tiempo de trabajo a 32 horas semanales, e hizo hincapié en que es “una concepción del trabajo muy alejada de la (suya)”.

En términos globales, consideró que uno y otro tienen “dos visiones de la izquierda” y que en estas primarias “está en juego el futuro de la izquierda”.

Preguntado sobre si apoyará a su rival en caso de que le gane, Valls se limitó a señalar que “(espera) al domingo” y que la campaña que lleva a cabo es “para ganar” y, más adelante, agregó que “las reglas de las primarias se respetarán”.

En la primera vuelta del pasado domingo, Hamon consiguió el 36 % de los votos, mientras que Valls se quedó con el 31 %.

En tercera posición, pero descalificado con un 17 %, Arnaud Montebourg pidió el voto para Hamon.

Hoy fue otro de los siete candidatos, el ecologista François de Rugy (4 % el domingo), el que se pronunció sobre su posible apoyo al señalar que no votará por Hamon ya que “su programa económico es irresponsable”, y añadió que espera a ver si se decantará por Valls.

Una cuestión que sigue causando polémica en las primarias son los datos de participación, después de que los organizadores hayan hecho bailar las cifras de forma confusa -se rumoreó que las habían inflado- hasta reconocer ayer errores e indicar, todavía con carácter provisional, que hubo 1,6 millones de personas que votaron, cuando el domingo habían hablado de cerca de 2 millones.

Valls hoy reconoció que 1,6 millones “es insuficiente” y pidió que más personas vayan a las urnas el próximo domingo.

También reclamó a los organizadores de la votación que “las cosas se hagan perfectamente” porque “la democracia no puede sufrir la menor duda”.