París

Valls descarta la vuelta de la familia de Leonarda y defiende a Hollande

El ministro francés de Interior, Manuel Valls, descartó hoy que la familia de la niña Leonarda expulsada a Kosovo pueda volver a Francia, una posibilidad que sólo ofreció a la escolar el jefe del Estado, François Hollande, al que defendió de las críticas que le han llovido en este caso.

"Se ha tomado una decisión de justicia en Francia y debe aplicarse", subrayó Valls en una entrevista con la emisora de radio "Europe 1", y advirtió ante los comentarios del padre de Leonarda de que retornará clandestinamente al país del que fueron deportados el pasado día 9 que "no sería aceptable".

En cuanto a las supuestas amenazas a la seguridad de la familia Dibrani en Kosovo, el titular francés de Interior indicó que ése es "un país democrático".

Además, dijo confiar "en las autoridades kosovares no sólo para garantizar la seguridad de sus ciudadanos, sino también la integración"de los Dibrani.

En cuanto a la oferta hecha el sábado por el presidente francés, François Hollande, para que Leonarda pueda volver sola a Francia para continuar su escolaridad, Valls la calificó de "un gesto fuerte".

Precisó que Hollande tomó esa decisión después de haber consultado con él, con el primer ministro, Jean-Marc Ayrault, y con el ministro de Educación, Vincent Peillon.

"Hizo un gesto de generosidad que honra a nuestro país", afirmó antes de cargar contra los que han denunciado por inconsistente esa oferta del jefe del Estado a la adolescente de 15 años: "los mismos que le critican ahora lo hubieran criticado si no hubiera habido algún gesto".

En cualquier caso, precisó que la propuesta para que Leonarda pueda retornar sola a Francia se ha hecho a la familia Dibrani, a la que invitó a "reflexionar"pero "al margen de este circo mediático"que se ha generado tras la expulsión de la adolescente cuando participaba en una excursión escolar después de que se hubiera rechazado la demanda de asilo del padre.

Valls dirigió un mensaje a sus compañeros de partido, algunos de los cuales han manifestado públicamente su disconformidad con la gestión del caso de Leonarda, con el argumento de que "hay que ejercer la autoridad escuchando a la sociedad".