Francia

Violenta protesta contra el proyecto de un nuevo aeropuerto cerca de Nantes

Miles de personas se manifestaron hoy contra la construcción de un nuevo y gran aeropuerto cerca de Nantes (oeste de Francia), en una protesta en la que se registraron incidentes violentos y que fue dispersada por la policía con cañones de agua y gases lacrimógenos.

La manifestación, que según cifras oficiales convocó a 20.000 personas, 1.000 de ellas consideradas "radicales", tuvo lugar dos meses después de la publicación de un decreto de la prefectura que autorizaba el inicio de los trabajos de diagnóstico previos a la construcción, que todavía no han comenzado.

Los disturbios se desataron en la parte final de la marcha, con el lanzamiento de botellas, latas y otro tipo de proyectiles contra los agentes desplegados para controlarla, entre los cuales, según el ministro francés del Interior, Manuel Valls, hubo seis heridos.

"En una democracia como la nuestra nadie puede aceptar tales exacciones", indicó en una conferencia de prensa, en la que calificó de "intolerables"esos actos, lamentó los daños materiales causados a comercios y mobiliario urbano y los atribuyó a miembros de la extrema izquierda.

Toda causa, "por noble que sea, no permite este tipo de actuaciones excepcionales y, para que no haya amalgamas, hace falta ser muy claro en su condena", añadió el ministro, quien mostró su confianza en que los autores de estos hechos acaben rindiendo cuentas ante la Justicia.

Valls teme que esos grupos aislados prolonguen lo que definió como "guerrilla urbana"e instó a las fuerzas del orden a estar atentas en las próximas horas y mantener su presencia sobre el terreno.

El plan de construir un nuevo aeródromo para sustituir al actual de Nantes, saturado y sin posibilidad de ser ampliado, se contemplaba desde hace más de 40 años y el ahora primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, alcalde de la ciudad desde 1989 hasta su nombramiento como jefe de Gobierno, se ha convertido en uno de sus principales defensores.

Pero casi seis de cada diez de franceses, según un sondeo publicado hoy por el instituto demoscópico Ifop, se oponen a ese proyecto, que tiene el respaldo de apenas un 24 por ciento de la población, frente a un 20 por ciento de indecisos.

La pregunta formulada por Ifop para llegar a ese resultado era si, teniendo en cuenta "el impacto económico, ecológico y climático", la construcción del nuevo aeropuerto de Notre-Dames-des-Landes debía mantenerse.

Vecinos, agricultores y ganaderos de la zona que también participaron en la protesta, a los que se han sumado ecologistas y grupos de izquierdas, insisten en que el retraso temporal en su construcción se transforme en permanente.

Una de las voces en contra que cobró protagonismo fue la de la ministra francesa de Vivienda, la ecologista Cécile Duflot, que en una entrevista en el diario "Le Monde"aseguró que, de no estar en el Ejecutivo, habría sido hoy una manifestante más.

"Mi oposición a este proyecto es antigua, nuestra participación en la mayoría no cambia nada. El tema no es político, es un medio para debatir la transición energética en un momento en que cuesta encontrar fondos para invertir", señaló.