Cuba

Visto bueno de Castro al «próximo» intercambio de embajada con EE UU

La medida se aplicará en cuanto Cuba salga de la lista de países terroristas, el 29 de mayo

Hollande habló ayer con Fidel Castro en su casa de La Habana. El viaje del presidente francés ha sido calificado de enorme «éxito» por parte del Gobierno galo
Hollande habló ayer con Fidel Castro en su casa de La Habana. El viaje del presidente francés ha sido calificado de enorme «éxito» por parte del Gobierno galolarazon

El deshielo entre Cuba y EE UU se produce a pasos acelerados gracias a la participación directa de los presidentes Raúl Castro y Barack Obama. Ambos quieren cambiar el curso de la historia, pero hay varios puntos clave en las complicadas negociaciones que ambos países mantienen desde hace cuatro meses. Uno de ellos está relacionado con la vuelta de los embajadores; el otro, con la «lista negra» de países que patrocinan el terrorismo. En ambos casos se hicieron avances importantes. «Ya se levantará ese tipo de injusta acusación y podremos nombrar a los embajadores», dijo Castro en un breve intercambio con la Prensa tras despedir en el aeropuerto a su colega francés François Hollande. La Administración Obama anunció en abril su decisión de quitar a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo. Eliminó así un obstáculo para el proceso de normalización de las relaciones entre ambos países anunciado en diciembre. Tras la decisión de Obama se deben esperar 45 días durante los cuales el Congreso puede bloquear la medida. La fecha será el 29 de mayo.

A lo largo de cinco décadas de enemistad, Estados Unidos aprobó una serie de sanciones contra Cuba presionando por un cambio en su modelo político. La mayoría de éstas sólo pueden ser levantadas por el Congreso debido a su carácter de ley, más allá de las prerrogativas presidenciales que permitieron a Obama suavizar algunas cuestiones como los viajes y los intercambios.

Castro aseguró que le expresó a Obama su preocupación por la actividad que desarrollan sus diplomáticos en la actual Sección de Intereses de Washington en La Habana, que hace las veces de representación de ese país. Ambos mandatarios se reunieron en abril en el marco de la Cumbre de las Américas, un encuentro histórico y el primero de líderes de ambas naciones en medio siglo.

Actualmente, los diplomáticos cubanos en Estados Unidos y estadounidenses en Cuba tienen limitación de movimiento a unos pocos kilómetros alrededor de sus respectivas embajadas, una medida que inicialmente fue impuesta por el ex presidente estadounidense George Bush y que fue aplicada en reciprocidad por los cubanos.

Tras los comentarios de Castro, el portavoz del Departamento de Estado, Jeff Rathke, dijo que no podía confirmar el plazo de Cuba para la designación de embajadores, pero indicó que sería «lógico» que se produzca una vez que se establezcan las relaciones diplomáticas plenas. Además, Raúl Castro ha insistido en que Estados Unidos debe «devolver» la base militar que posee en Guantánamo, entre otras medidas, para normalizar plenamente las relaciones bilaterales. «Tiene que eliminarse el bloqueo y la base de Guantánamo debe ser devuelta a Cuba».