Elecciones en Argentina

El voto provincial marcará el resultado de la segunda vuelta entre Milei y Massa

Las provincias de Córdoba y Mendoza pueden desequilibrar la balanza en favor de uno u otro candidato

Javier Milei cerró su campaña para el balotaje presidencial en Argentina en la provincia de Córdoba y no en la capital como su adversario Sergio Massa. No es casualidad. Se trata de la segunda provincia más poblada del país, donde votan tres millones de electores, y considerada clave en estos comicios.

Córdoba, que tuvo un llenazo para el último acto de masas del candidato libertario, es la región más opositora al kirchnerismo, históricamente. Fue allí donde el expresidente Mauricio Macri consolidó su victoria de 2015 y quedó mejor parado en 2019 a pesar de perder la reelección.

Javier Milei salió como el más votado en la primera vuelta allí, con el 33,54% de los votos, seguido por el saliente gobernador Juan Schiaretti (29%), un peronista no afiliado a la coalición oficialista. La candidata de la oposición tradicional, Patricia Bullrich, tuvo 22,62% y Sergio Massa apenas el 13,42%, su peor desempeño a escala regional.

Es un punto de partida ventajoso para Milei, ahora aliado con Bullrich y Macri. Pero no las tiene todas ganadas: la Unión Cívica Radical, de buen arrastre electoral en Córdoba, no quiso decantarse por ningún candidato y calificó de «extremismo demagógico» la propuesta de La Libertad Avanza. Tampoco está claro a dónde irán los más de 600.000 votos que sacó Schiaretti.

En todos estos años, a pesar de ser peronista, el gobernador saliente se ha mantenido enfrentado a Cristina Kirchner. Por estos días ha criticado del «desastre económico que viene haciendo el Gobierno kirchnerista de Sergio Massa» pero no ha apoyado públicamente a Milei, ni lo hará.

El candidato oficialista Massa también visitó esta semana Córdoba, particularmente la ciudad Río Cuarto. «Muchas veces Córdoba sintió que desde el poder central se le dio la espalda, por la parte que me toque, mis disculpas a los cordobeses», se atrevió el ministro de Economía.

Otro territorio que también será clave para el resultado será la provincia de Mendoza, la cuarta en importancia electoral con 1,5 millones de votantes, que también le ha sido esquiva al kirchnerismo. En las generales del 22 de octubre, Massa sacó 24% frente al 42% de Milei. En el medio quedaron el 26% de Bullrich y el 4% de Schiaretti. La mayor parte de esos treinta puntos se irán al candidato de La Libertad Avanza (LLA).

Son dos provincias, por tanto, donde el oficialismo busca aumentar sus números, pero, especialmente, incentivar la abstención. Allí se han concentrado las campañas que hablan de un Milei desequilibrado, de un «salto al vacío». El candidato libertario de hecho respondió este jueves en su cierre de campaña que no hay nada que temer: «¿De qué salto al vacío me hablan si nos estamos yendo al mismísimo infierno?».

En Santa Fe, la tercera provincia con más electores (2,8 millones), Milei también luce imbatible, aunque Massa obtuvo en la primera vuelta un repunte importante con respecto a las primarias obligatorias de agosto hasta ubicarse en el segundo puesto. Allí el resultado estará «peleado».

Donde el oficialismo luce más fuerte es en la Provincia de Buenos Aires, la más poblada con 13 millones de electores. Allí gobierna el kirchnerismo, con un Axel Kicillof que logró la elección y que se espera sea clave para traspasar funcionarios a una gestión nacional de Massa, de ganar la presidencia. Además, en octubre 84 de los municipios de ese territorio eligieron a intendentes (alcaldes) del oficialismo frente a los 47 que se decantaron por candidatos de Juntos por el Cambio. La plataforma de Javier Milei no obtuvo ninguno.

Fue un resultado positivo para Massa, especialmente en las zonas del conurbano (las afueras de la capital), con unos liderazgos locales que se han comprometido en la campaña territorial calle a calle. No es casual que Massa haya cerrado su campaña en la ciudad de Buenos Aires, punto clave de la provincia con la que aspira compensar los escenarios de Córdoba y Mendoza.

En la capital federal, que tiene 2,5 millones de electores, Juntos por el Cambio con Jorge Macri al frente (primo del expresidente) tiene primacía. En octubre logró una diferencia tan grande que el candidato oficialista a gobernador renunció al balotaje. Una ventaja que también se vio a favor de Bullrich en la primera vuelta presidencial, mientras que Milei llegó de tercero.

El alcalde Macri no se pronunciará a favor de Milei para este domingo, pero sí aportará estructuras partidistas que sirvan como testigos electorales a favor del abanderado libertario, tanto en su territorio como en otros municipios de la provincia.