Están haciendo tambalear el reinado de pantalones vaqueros skinny, los clásicos pitillo. La versatilidad que ofrecen, son perfectos para llevar con botas, botines, zapatillas o zapato plano (mocasines y bailarinas por ejemplo) y lo favorecedores que resultan para cualquier silueta, potenciando las curvas y alargando visualmente la figura, han provocado que sea difícil no querer sumarlos cada temporada otoñal a nuestro armario. En efecto, hablamos de los jeans de corte flare.

Bien podríamos definirlos como diseños de tiro alto, ajustados y ligeramente acampanados en el bajo pero sin ser exagerado, el toque perfecto para elevar la pieza. Sientan tan bien que han logrado quitar protagonismo a otro tipo de pantalones tan punteros esta temporada como los de estilo chándal o incluso los de polipiel. ¡Es una maravilla!

¿Cómo los combino?

A diferencia de aquellos de estilo mom o boyfriend, cuya forma hacía más compleja su combinación, este tipo de pantalones vaqueros son ideales para llevar con diseños ajustados metidos por dentro, ya sea un top, una camiseta o incluso un jersey más fino, como con opciones de estilo oversize como camisas, chalecos de puntoo cualquier otra prenda del armario de tu novio.

De la misma forma ocurre con el calzado, este tipo de pantalones da para mucho juego y son perfectos para combinar con zapatillas, dando lugar a estilismos más desenfadados y casual, pero también para sumar un par de botas o botines con ligero tacón y brillar en cualquier cita nocturna. Quizás ahí resida la clave de su éxito total en las calles y en Instagram.