¿Vas a la Feria de Málaga por primera vez? Esto es todo lo que no te puedes perder de la tierra de Antonio Banderas

Málaga, esa ciudad de la que todos hablan, ese territorio donde el mar se funde con el olor a jazmín y donde las malagueñas suenan al son de las panderetas. Así es Málaga, una tierra andaluza que derrocha arte por los cuatro costados. La capital de la Costa del Sol se viste de lunares para su semana grande, vuelve la Feria de Málaga, vuelve el arte a las calles de la tierra de Antonio Banderas.¿Es la primera vez que viajas a Málaga para conocer su feria?¿es tu primer viaje a la ciudad donde Pablo Alborán pone voz en todas sus canciones? Estos son todos los lugares y planes que no te puedes perder si Málaga es tu próximo destino.

Antes de empezar hablar de planes, debes saber un par de cosas muy importantes. Málaga es la única ciudad de España que tiene dos ferias, una de día en el centro de la ciudad y otra, durante todo el día en el Recinto Ferial (está es la más grande). Y, otra cosa a tener en cuenta, si te vas alojar en la capital deberás saber que el ruido durante el día lo tienes asegurado, así que busca un lugar donde puedas descansar, si sales de noche. Dicho esto, comenzamos.

Pasear por la ciudad y descubrir sus rincones más emblemáticos

¡Enhorabuena has llegado a la ciudad más moderna de Andalucía! Deja tu equipaje y disponte a visitar la ciudad (a una hora decente que estamos en feria). Recorre la calle Larios, la más emblemática de la ciudad y presidida por el Marqués de Larios. Llega así hasta el Teatro Cervantes y baja por la Plaza de la Merced, pasando por la Casa Natal de Pablo Ruiz Picasso hasta llegar a las puertas de su propio museo en Calle Alcazabilla, un museo con vistas al Anfiteatro Romano y la Alcazaba con el que te quedarás sin palabras.

Por último, este recorrido debe acabar visitando la Catedral de Málaga y descubriendo por qué solo tiene una torre en su estructura, ‘La Manquita’, la llaman.

Visita el Paseo del Palmeral en Muelle Uno

Uno de los grandes puntos clave de la ciudad es el puerto. Sin duda, un paseo caminando por el Palmeral de las Sorpresas con vistas al Mar Mediterráneo y al faro de la ciudad, no tiene precio. Si lo haces atardeciendo, tiene una magia que ‘quita el sentio’.

Tómate una copa de vino dulce

En Málaga, el vino es clave. No puedes irte de la ciudad sin pasar por la ‘Bodega Casa del Guardia’ para tomar una copa de vino dulce o sentarte en la terraza de ‘El Pimpi’ y disfrutar de una botella de Málaga Virgen. Esto es imprescindible.

Disfruta de los espetos de sardinas en la Playa de Pedregalejo

Si el vino era imprescindible, esto es obligatorio. Poneos guapos, coged el coche o el transporte público, visitad la Playa de Pedregalejo y sentaros en ‘Restaurante Antonio’, a pie de playa, para disfrutar de los espetos de sardinas más deliciosos de la ciudad. No preguntes qué es, pruébalo y disfruta.

Visita el Real de la Feria

La Feria de Málaga es una de las más grandes de España y tienes que visitarla. En el Real de la Feria, durante el día podrás visitar cualquier caseta, pedirte una botella de Cartojal (el vino de la feria) y hasta comer gratis. Por la noche, la fiesta está asegurada y si buscas noche de locura y desenfreno, no puedes olvidarte de recogerte al amanecer.

Y, si te sobra tiempo, recuerda que Málaga es la ciudad de la cultura y cuenta con más de 30 museos en la capital: Museo Picasso, Museo Thyssen o Museo Pompidou, entre otros. La cultura enriquece y Málaga lo hará contigo.