La revolución del 'After Sun' para proteger tu piel

¿Sabías que entre el 70 y el 90% del envejecimiento prematuro de la piel está causado por el sol? ¿Y que sus efectos siguen actuando en las células hasta 4 horas después de tomarlo?

Unas cifras impactantes que nos hacen tomar consciencia de la importancia -y de la necesidad- de una buena protección. No solo antes de dejarnos caer sobre la toalla, sino después de tostarnos al sol. Si no quieres aparentar unos cuantos años de más después del verano, lleva siempre contigo el after sun. El pasado 13 de junio se celebró el Día Mundial del Cáncer de Piel, una fecha que nos recuerda la importancia de proteger nuestra piel para evitar daños mayores. No basta con aplicarnos cremas y lociones con filtros de protección solar (FPS) antes de tumbarnos al sol, es igual de importante hacerlo a posteriori. Y, para ello, nuestro gran aliado es el after sun.

Los beneficios de este elixir postbronceado imprescindible son muchos:

• Adiós al escozor y la tirantez

• Un chute de calma y frescor

• Una poderosa dosis de hidratación

• Piel regenerada

• Bronceado más duradero

Atrás quedan las lociones espesas e imposibles que dejaban la piel blanca y una sensación pegajosa e incómoda. Desde hace unos años, el after sun ha experimentado una notable evolución y se puede encontrar en formato crema, gel, leche, bruma, y hasta en mascarilla.

CON ALOE VERA, CENTELLA ASIÁTICA E INCLUSO ÁCIDO HIALURÓNICO

A su variedad de formatos se une la de ingredientes. “Muchos están formulados con mentol y extracto de camomila, que aportan un efecto calmante y refrescante. Otros llevan aloe vera, pantenol y centella asiática, que hidratan y reparan la piel irritada, evitando la descamación”, explica la doctora Aurora Garre, Medical Marketing Manager de Isdin. La manteca de karité, la caléndula y la rosa mosqueta también son elementos habituales e incluso el ácido hialurónico, gran aliado para retener el agua de la piel, se encuentra en la composición de muchos after sun.

Sea cual sea la versión que elijas, lo importante es que lo utilices, y de forma adecuada. “Tras una ducha para eliminar los restos de fotoprotector, arena y cloro debes aplicarte el after sun por todo el cuerpo cuantas veces consideres necesario”, precisa Garre.

Además de prevenir quemaduras solares que pueden derivar en cáncer de piel, este bálsamo combate los efectos de los radicales libres y minimiza los signos del envejecimiento gracias al poder antioxidante de las vitaminas A,C y E.

1. Bálsamo calmante con extracto de cártamo, que intensifica y prolonga el bronceado, y aporta 48h de hidratación Clarins

2. Leche reparadora con ácido hialurónico y aceite de plántulas de avena rhealba A-Derma Protect AH

3. Bálsamo con extracto de monoï que hidrata la piel y mantiene el bronceado hasta un mes después de la última exposición solar Dior

4. Mascarilla que hidrata y aporta luminosidad tras el bronceado Nutritive Instant Mask Sepai