El Rey Felipe pide disculpas tras su fin de semana en Formigal: esta es la importancia de usar protección solar en la nieve según una experta

El Rey Felipe ha retomado su agenda oficial este lunes tras su fin de semana en la nieve, y lo ha hecho con el rostro visiblemente quemado y con las marcas de las gafas de esquí. Felipe VI es un gran aficionado al esquí. Una pasión que ha podido disfrutar este fin de semana en la estación de Formigal, en el valle de Tena del Pirineo Aragonés, junto a varios amigos como Antonio Gericó, presidente ejecutivo de Aramón. Paisajes espectaculares, buena nieve, instalaciones modernas y amplia oferta gastronómica, estos son algunos de los encantos que ofrece este lugar que cada año atrae a cientos de turistas.

Por eso, el Rey Felipe ha querido dejar claro la importancia de usar protección solar si vas a esquiar antes de empezar su discurso: "Disculpen este aspecto que llevo, porque es lo que uno no se protege adecuadamente del sol". Es importante usar protector solar al esquiar para proteger la piel de los efectos de la radiación ultravioleta (UV). La nieve refleja el 80% de los rayos UV y la altitud aumenta la radiación. Por eso, en Lifestyle de La Razón hemos querido preguntar a Rachel Keys, experta en dermoestética, para que nos de las clave de cómo nos debemos proteger la piel si vamos a esquiar.

¿Por qué debes protegerte de la radiación solar en la nieve?

La nieve, por su blancura y composición, actúa como un potente reflector de la radiación solar, llegando a reflejar hasta un 80% de los rayos ultravioleta (UV). Esto significa que, al exponernos al sol y, estando en la nieve, no solo recibimos los rayos directos, sino también los reflejados por la superficie, aumentando considerablemente la cantidad de radiación que alcanza nuestra piel. Usar un protector solar facial para invierno es fundamental en estos casos, ya que protege las zonas más expuestas, como el rostro, que es particularmente vulnerable al daño por la radiación reflejada en la nieve.

"Como experta en dermoestética, quiero enfatizar la importancia del protector solar al esquiar, ya que la nieve refleja hasta un 80% de los rayos UV, aumentando significativamente el riesgo de quemaduras, envejecimiento prematuro y daños celulares. Además, en altitudes elevadas, la exposición a la radiación UV se incrementa hasta un 12% por cada 1,000 metros, y el frío o el viento no reducen sus efectos nocivos. Por ello, es muy importante aplicar un protector solar SPF 50+ resistente al agua, reaplicarlo cada dos horas y no olvidar áreas como labios, orejas y cuello. También es clave usar gafas con filtro UV para proteger la delicada piel del contorno de ojos", nos explica Rachel Keys, enfermera experta en dermatología.

¿Qué protección solar usar en la nieve?

Anthelios Uvmune 400 Fluido Invisible SPF50+

Ideal para quienes buscan un acabado natural sin renunciar a una protección solar muy alta. Esta crema con color de textura ligera protege frente a los rayos UVA/UVB y ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro causado por la exposición solar. Además, es resistente al agua y no tiene perfume, perfecta para pieles sensibles.

Mountain SPF 50 Protector Facial + Lipstick SPF 30

Especialmente pensado para deportes de alta montaña, este formato compacto incluye protector solar facial SPF 50 y bálsamo labial SPF 30. Ocupa poco espacio y es perfecto para llevar en el bolsillo del anorak. Protección completa donde más lo necesitas.

Fotoprotector Isdin Cara Extrem 90 Crema 50ml

Si lo tuyo son las alturas o pasas muchas horas en exteriores con nieve, esta crema facial está formulada para ofrecer una protección máxima frente a la radiación UV. Es muy resistente, se absorbe rápido y está recomendada para pieles especialmente sensibles o fotosensibles.

Una jornada en la nieve puede ser un desafío extremo para la piel debido a la combinación de alta radiación ultravioleta (UV), frío, viento y baja humedad. Así que ya sabes, si vas a la nieve este fin de semana, no te olvides de aplicarte cada dos horas protección solar, para que no sufras unas quemaduras como las del Rey Felipe.