Madrid

Mar Flores: «A partir de cierta edad no hay nada gratis»

Mar Flores: «A partir de cierta edad no hay nada gratis»
Mar Flores: «A partir de cierta edad no hay nada gratis»larazon

Mi última semana tiene un titular: «Persiguiendo a Mar Flores», como el nombre con el que bautizó su blog en Telva.com. Presentadora, actriz y empresaria, en la actualidad tiene su propia marca y es embajadora de Women Together para Latinoamérica y Caribe. Su vida ha estado cargada de polémica, pero siempre resurge como el ave fénix. No se esconde aunque tampoco se deja ver fácilmente. Hoy ha querido compartir algunos de sus trucos de belleza y su pasión por la moda.

–¿Cómo va tu tienda solidaria?

–Es un proyecto a largo plazo, para consolidar una marca se necesita tiempo. Sin embargo, mi tienda on-line ya ha sido reconocida como primer «e-commerce» solidario español. Las bases de la marca Mar Flores Madrid se asientan sobre tres pilares importantes: el «made in Spain», lo artesanal y la solidaridad.

–También vives tu aventura como «blogger»...

–Mi colaboración con «Telva» surgió hace casi dos años de una forma espontánea. Llevaba cuatro con mi blog personal que tiene muchos seguidores, así que «Persiguiendo a Mar» fue una prolongación del otro, aunque más centrado en moda y cosmética. ¡Está siendo todo un éxito!

–¿Qué prenda es fundamental en tu fondo de armario?

–Los vaqueros, y más ahora, que lo que se lleva es el «normcore» (que se trata de vestir sin extravagancias). Para la vida diaria me gustan los pantalones y el calzado plano: es más cómodo para mi ritmo de vida.

–¿Cuál es el secreto para conciliar la vida profesional con el plano familiar?

–Mi jornada laboral es desde que dejo a los niños en el cole hasta que los recojo. A partir de las17:00 horas, que vuelven del cole, y hasta que se acuestan ni cojo el teléfono. Y cuando ya están dormidos, comienza mi vida nocturna de trabajar en los blogs, seguimiento de mi tienda on-line, informarme de la actualidad y las tareas que tenga pendientes.

–¿A qué capricho eres incapaz de renunciar?

–A compartir tiempo con mi marido y mis hijos.

–¿Qué metes en la maleta para un viaje inesperado?

–Me planto un vaquero y una camisa también vaquera. También metería algunos básicos como un «little black dress», una chaqueta de esmoquin y una camisa blanca de mi marido, de ahí me salen «outfits» todoterreno. Y mi bolsa de aseo, que siempre tengo preparada con mis productos de belleza. Con todo eso, me puedo ir al fin del mundo.

–¿Usas la ropa de tu marido?

–Pues aunque parezca extraño, sus camisas me sacan siempre de un apuro. Y ahora está muy de moda ese medio look masculino que tanto me gusta. ¡Así que muchas veces recurro a su armario, no al mío!

–¿Qué significa para Mar Flores ir vestida de manera acertada?

–Lo he aprendido a base de acertar y de equivocarme. La elegancia reside en saber cómo ir en cada momento y en cada lugar según lo que sea más adecuado y, sobre todo, de la forma más discreta posible. De esa forma seguro que no llamas la atención por estar fuera de lugar.

–¿Crees que el amor es uno de los mejores tratamientos «antiaging»?

–El amor es muy importante para todo, pero la felicidad que cada uno tiene dentro de sí mismo, sea por sentirse amado o por amar, es más productiva, hace que la piel brille y le da una luz especial al rostro.

–¿Cómo se puede tener una figura tan espectacular como la tuya después de haber tenido cinco críos?

–Realmente no me preocupé mucho por el físico hasta que tuve el tercer hijo, porque mi genética me ha ayudado bastante. Tras los mellizos tuve que triplicar las clases de pilates y de natación. Es decir, disciplina y más disciplina. A partir de cierta edad no hay nada gratis. Tu cuerpo necesita cuidados y hay que dárselos si queremos estar bien, no sólo por estética, sino también por salud.

–¿Cómo cuidas tu alimentación?

–Ignoro lo que es una dieta, pero trabajo la compensación. Si un fin de semana o una noche me paso, inmediatamente compenso para no dar opción a que se acumule en ningún sitio.

–¿Qué piensas sobre las operaciones?

–Eso depende de cada uno. Para mí, si a una persona le llega a producir un trauma un determinado defecto físico, entonces me parecen necesarias porque le cambia la vida y le sube la autoestima. Pero cada uno debe utilizarla como considere oportuno, siempre y cuando no se vuelva loco con este tema.

–¿Pasarías por quirófano?

–Aún no lo he necesitado, aunque más adelante no lo sé, depende de cómo se encuentre mi coco... De momento prefiero los cuidados diarios para prevenir...