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Jorge Usón: La felicidad de la «slow food»

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Jorge Usón: La felicidad de la «slow food»
Jorge Usón: La felicidad de la «slow food»larazon

Según su abuela «siempre está en un pienso». La comida le apasiona y especialmente la fritada aragonesa que le hace «relinchar»

Según su abuela «siempre está en un pienso». La comida le apasiona y especialmente la fritada aragonesa que le hace «relinchar»

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Merluza al estilo Orio

Ingredientes:

-Merluza

-3 dientes de ajo en tiras

-1 cayena

Elaboración:

-Se hace el sofrito con aceite primero y después vinagre hasta que reduzca y aminore la fuerza del segundo. Se precalienta el horno a máxima temperatura y se introduce la merluza sazonada con esa sartén de ajos durante unos minutos. Ir comprobando con un tenedor que la merluza está cocinada.

-Ojo con asar el pescado demasiado que se hace enseguida. Es ideal el cogote de la merluza o una cola gruesa.

Se reconoce mejor comensal que cocinero, «estoy siempre en un pienso», cuenta evocando a lo que le decía su abuela; pero asegura que cada día encuentra mayor diversión entre fogones. Jorge Usón no para. A punto de estrenar el 19 de agosto el musical de Sondheim «Golfus de Roma», en el marco de los Veranos de la Villa, atiende a LA RAZÓN para explicar su pasión culinaria.

Afirma que todo lo que sabe lo ha heredado de su familia. «Me encantaba observar a mis abuelas y a mis padres cocinar, que te fueran contando sus jugadas y trucos. Creo que cocinar es un acto de amor que retrata al cocinero. Además, es curioso ver cómo heredamos los mitos familiares en temas gastronómicos. Por ejemplo, eso de matar la cebolla con sal y vinagre antes de hacer una ensalada o comprar una determinada marca de arroz porque es la que siempre compraban tus padres», confiesa. Le resultan irresistibles los calamares en su tinta con arroz y las milanesas a la napolitana, «aunque la fritada aragonesa me hace relinchar», asegura.

Usón tiene su propio método también en lo que alimentación se refiere, más aún teniendo en cuenta que pasa casi todo el día sobre el escenario o delante de una cámara. «Antes de las funciones tomo una merienda modesta porque es molesto actuar con el estómago lleno. Prefiero reservarme para después. Al terminar una función se desata el hambre y la sed. Realmente, creo que el teatro engorda», dice con una sonrisa.

En plató también tiene sus trucos. Según Usón, él puede soportar todo muy bien, salvo el hambre. Por eso, ahora que está a punto de emitirse «B&B», la serie de Telecinco en la que interpreta a Lucas, explica que los catering son su bendición. «No puedo evitar cabrearme si tengo mucho apetito o sed. Creo que por eso nunca me fui de interrail. Sin embargo, creo que los catering son demasiado abundantes y paradisíacos, además de una prueba de fuego para adelgazar», asevera. Eso sí, en escena no pica ni un fruto seco. «Recuerdo en una función en la que sacábamos un pescado al horno. De lejos daba el pego total, pero de cerca era una maraña de corcho pintado», explica. De igual modo, los grandes tragos de whisky que pega su personaje en la obra «Invernadero» que dirige Mario Gas y que pronto continúa su gira por España, no eran más que sorbos de agua teñida. Una decepción.

A Jorge le encanta recibir en casa, quizá no con el glamour de Preysler, pero sí con todo el cariño de un hogar acogedor. «Me gusta estar en la mesa con la gente que quiero. Mi casa, mi cocina, una buen charla... Eso sí, lo peor es ponerse a fregar después», lamenta. Algo que seguro no ocurre en casa de la actual pareja de Vargas Llosa. No es amigo de las «fast food», aunque reconoce que se han hecho inevitables. «Soy más del “fast”, pero cuando es “good”», matiza. Además, aprovecha para explicar que en una visita reciente a México visitó un «slow food». «Fue una delicia, una experiencia artesanal. Tardamos tres horas en comer pero fuimos felices. Sin reloj se vive mejor», sentencia.

Mi restaurante favorito

«Casa Emilio, en Zaragoza. Es un lugar lleno de arte y teatro. Allí estoy como en casa. Me encantan los sitios caseros donde en un momento dado uno se puede arrancar a cantar».