Exotismo puro y de calidad en primera línea de mar

La playa de Barcelona es vista por muchos como un lugar privilegiado y único donde degustar la gastronomía mediterránea en primer línea de mar, pero el litoral barcelonés ofrece otras propuestas culinarias de primer nivel que contribuyen a dar un aire más cosmopolita e internacional a la franja marítima de la ciudad.

Hace ya unos años Carpe Diem Lunch Club se ganó un lugar privilegiado entre los clubs de ocio nocturno de la Ciudad Condal, pero además ahora este establecimiento se ha hecho con un hueco entre los restaurantes de referencia de la ciudad gracias al Carpe Diem Gastro. Y es que al margen de contar con una excelente y privilegiada ubicación en primera línea de mar, este restaurante resulta especialmente atractivo por su exótica oferta gastronómica.

Su extensa carta se basa en sabores y recetas asiáticas, hindús y árabes, siempre elaboradas con productos de máxima calidad, algunos adquiridos a través de una quincena de proveedores de todo el mundo y otros directamente de La Boquería; respetando al máximo sus orígenes y potenciando su atractivo visual mediante una excelente presentación.

Para hacer realidad este viaje culinario por lo exótico, los chefs Alfonso Aranda y Rodrigo Hurtado recorrieron un sinfín de ciudades en busca de los sabores y platos que posteriormente integrarían la carta del CDLC, un establecimiento que además cuenta con un equipo internacional integrado por una veintena de cocineros de China, Pakistán, India y Europa .

El resultado de la experiencia es una amplia y rica carta con platos como el nigiri de Toro; sashimi; el tajine de cordero con cous-cous, dátiles, harina, verduras y almendras; la selección de tapas árabes o el entrecot de buey Wagyu. Además. el pan que se sirve en el Carpe Diem Gastro es responsabilidad de Paco Roig, panadero artesanal de los hermanos Adrià, mientras que los postres son obra de la aregtnina Nerina Ciordina.

Acorde con estas reminiscencias orientales y árabes que definen la cocina del este establecimiento, la decoración del local rezuma también un aire exótico, con mesas de artesanía marroquí, mtarebs árabes, grandes budas o unas cómodas y atractivas camas balinesas donde el comensal puede también degustar la oferta culinaria del local y probablemente el mejor lugar donde hacerlo es en su magnífica terraza a pie de playa, abierta todo el año.

Y si bien es cierto que éste es un lugar exclusivo y privilegiado, el Carpe Diem Gastro ha hecho un esfuerzo por ser accesible a todos los públicos, para lo que ha configurado un menú degustación de 60 euros así como un menú ejecutivo para los mediodías entre semana de 17 euros.

uerda que, por su carácter playero, el establecimiento sólo está abierto durante los meses de buen tiempo, es decir, aproximadamente, desde el mes de abril hasta noviembre.