Tradición contemporánea para buenos paladares

El restaurante Bodega Sepúlveda conserva sus señas de identidad desde sus orígenes hace 64 años pero puestas al día

Bodega Sepúlveda es un lugar único. Regentado por la tercera generación de la familia Solà, este establecimiento, con 64 años de vida, conserva su alma originaria pero, a la vez, ha sabido adaptarse de forma natural y sin cambios bruscos a las nuevas características y perspectivas del mercado. «Abrimos como la típica bodega clásica de los años 50 para reconvertirnos en los ochenta en un lugar de tapas y actualmente éste es un restaurante de comida tradicional catalana, que apuesta por una cocina de mercado y ofrece tanto tapas como raciones», explica su propietario Josep Solà.

«A nosotros nos gusta decir que la Bodega Sepúlveda es una restaurante de tapas con mantel», comenta su hija y jefa de sala, Sonia Solà quien, junto a su hermana Nuria al mando de los fogones, acompañan a Josep Solà en la gestión diaria del restaurante. «Es una cocina del momento puesto que apostamos por el producto fresco y de máxima calidad y es que el cliente de este nivel no perdona ya que es gente de muy buen paladar, por lo que el producto ha de ser excelente, si no, no lo servimos», añade.

Y es que, en definitiva, Bodega Sepúlveda apuesta por mantener la esencia de sus orígenes adaptada al momento actual, y en este sentido su estética recuerda a la de un bistrot de los años cincuenta. Así, una enorme y maciza barra de madera , que se mantiene desde sus orígenes, da la bienvenida al comensal, a quien pronto sorprenden las barricas de madera ubicadas en un altillo, los ladrillos y la madera como grandes protagonistas o el balcón interior del segundo piso con vistas a la entrada.

Sin embargo, a lo largo de todos estos años, el espacio ha sufrido varias remodelaciones para ponerse al día. Entre otras, la terraza exterior con la que cuenta Bodega Sepúlveda, con capacidad para unas cuatro mesas, aunque el futuro de este espacio, abierto todo el año, es incierto. «Hace una década abrimos la terraza y ahora es posible que nos dejen sin porque han puesto una parada de autobús al lado y, aunque parecía que ésta iba a ser provisional, todo apunta a que finalmente la dejarán fija», lamenta Sonia.

En cualquier caso, este establecimiento ha sobrevivido a muchos cambios, mucha competencia y muchos años, y en gran medida ello ha sido posible gracias a su capacidad de adaptarse a las circunstancias y a su apuesta por un tipo de oferta muy específica. «Creo que nuestras principales señas de identidad son nuestra evolución, que definiría bajo el concepto de tapas con mantel, y nuestro carácter familiar”, comenta Josep Solà, quien añade «que esa evolución ha tenido que hacerse sin cambios bruscos, porque de otra manera, no funciona, y atendiendo siempre a la demanda de nuestros clientes».

Por su parte, su hija pone de relieve el «importante reto que ha sido el seguir funcionando durante todos estos años con tanta oferta y tan buena, pero lo cierto es que no ofrecen lo que ofrecemos nosotros». «Nuestro cliente tiene muy claro lo que viene buscando cuando acude a nuestro restraurante», asegura Sonia Solà.

Restaurante Bodega Sepúlveda

Dirección: c/ Sepúlveda, 173

Teléfono: 933 23 59 44

Horarios: de lunes a viernes de 13.30 a 16 y de 20 a 00.00 h. Sábados de 20.00 a 00.00 h.