Lifestyle

El curioso «affaire» del príncipe y la corista

La actriz Debbie Reynolds cuenta en sus memorias «Make ‘Em Laugh» cómo el duque de Edimburgo se sobrepasó con ella en la fiesta de cumpleaños de Bob Hope en 1985

La actriz Debbie Reynolds conversa con el príncipe Felipe de Edimburgo en Londres, en 1985
La actriz Debbie Reynolds conversa con el príncipe Felipe de Edimburgo en Londres, en 1985larazon

La actriz Debbie Reynolds cuenta en sus memorias «Make ‘Em Laugh» cómo el duque de Edimburgo se sobrepasó con ella en la fiesta de cumpleaños de Bob Hope en 1985

Sucedió en el cumpleaños del comediante Bob Hope en Londres en 1985. Debbie Reynolds, la diva de «Cantando bajo la lluvia», viajó hasta Reino Unido –en el desaparecido Concorde, junto con Brooke Shields– para asistir a la fiesta de su amigo, donde también estaban Michael Caine, Ben Kingsley, Phyllis Diller, Charlton Heston y Chevy Chase. Y, claro, el duque de Edimburgo, que felicitó a Hope por sus logros y aprovechó para conversar con la actriz estadounidense. «Era encantador. Me puso un brazo alrededor de la cintura, después me tomó de la mano», recuerda Reynolds, «casi inmediatamente, pasó a tomar más que mi mano. Me acarició el trasero». La cantante, lejos de ofenderse, tan sólo se sorprendió: «Había escuchado que era famoso por su “admiración” hacia las mujeres, pero no estaba esperando que me agarrara el trasero. Con lo guapo que es el príncipe Felipe, no sabía si estaba intentando ligar conmigo o simplemente ejerciendo algún derecho real de manosear a los extranjeros». Con el paso del tiempo, Reynolds ha concluido que el gusto, más que de él, fue de ella: «De hecho, fue todo un honor que me cacheara este adorable príncipe».

No es el único episodio divertido sobre la realeza europea, ni sobre agarradas de trasero, que Reynolds, de 83 años, recuerda en su autobiografía «Make ‘em laugh», que se publica hoy. Cuenta también que una vez se escapó de los estudios de MGM junto al rey de Bélgica, mientras sus guardaespaldas se volvían locos buscándolo. También escribe –aunque con menos humor– que Robert Kennedy, entonces fiscal general de Estados Unidos, «hizo una maniobra similar a la del duque, pero su manoseo fue menos encantador que el de aquél».

- Reina de Hollywood

La propia Reynolds fue considerada parte de la realeza de Hollywood durante más de sesenta años, un puesto bien ganado por sus interpretaciones en películas como «La conquista del Oeste». Su talento y belleza le valieron la atención de muchos de los galanes de la época, entre ellos Eddie Fisher, su primer esposo. En sus memorias, Reynolds cuenta que su «falta de pasión» seguramente fue la causa de que ninguno de sus tres matrimonios –con el citado Fisher, el magnate Harry Karl y con Richard Hamlett– funcionasen. Escribe, sin tapujos, que Fisher le decía: «Tengamos sexo. Comienza tú y yo me uno después», pero que ella «no tenía idea de qué me estaba hablando. Lo único que mis padres me enseñaron sobre el sexo fue a decir que no». Con el cantante tuvo a sus dos hijos, Carrie y Todd. Carrie es conocida por toda una generación como la princesa Leia, y justamente ahora los fanáticos de «Guerra de las Galaxias» podrán volver a verla en la última entrega de la saga, «El despertar de la fuerza», que se estrena el 18 de diciembre.