Equitación

El hermano filántropo de Muñoz Escassi

Juan Luis utiliza su pasión deportiva, el triatlón, para recaudar dinero con fines solidarios

Con el «reto Pichón» 2016, y tras 10 triatlones, Juan Luis donará 13.000 euros
Con el «reto Pichón» 2016, y tras 10 triatlones, Juan Luis donará 13.000 euroslarazon

Juan Luis utiliza su pasión deportiva, el triatlón, para recaudar dinero con fines solidarios

Juan Luis es el hermano mayor del conocido jinete Álvaro Muñoz Escassi. Es un amante del deporte, concretamente del triatlón, tanto que un buen día decidió utilizar su pasión deportiva para luchar por causas solidarias. «Cuando ayudas a los demás, te sientes bien, realizado, feliz, útil, querido, valorado y respetado», explica.

Así fue como nació hace algunos años el «reto Pichón» para el hermano filántropo de Álvaro:«Pretendo a través del deporte ayudar a todo el que lo necesita». De hecho, este sevillano es director general de la Asociación de Fundaciones Andaluzas, que aglutina a 800. El reto de este 2016 consistía en correr 10 triatlones para recaudar 13.200 euros con destino a la Fundación Olivares, que se encarga de financiar a familias con niños con cáncer que no tienen recursos y viven fuera de Málaga. «Se tienen que tirar muchos meses en un hospital infantil y la familia se tiene que dividir quedándose el padre o la madre con el otro hijo o también por motivos de trabajo, lo que puede destruir a las familias», asevera.

«Yo quería que mi reto sirviera para algo relacionado con la infancia y con el cáncer, porque a mi madre le diagnosticaron un cáncer y estaba muy sensibilizado con el tema», nos cuenta Juan Luis: «La Fundación Olivares me pareció perfecta para mi reto. Con el dinero recaudado ayudaré a dos familias que tienen un niño y una niña con leucemia y durante un año tendrán un lugar donde vivir cerca del hospital y asistencia psicológica para soportar estos duros momentos».

El «reto Pichón» comenzó el pasado 4 de junio y finalizó con éxito ayer domingo en Gijón. Juan Luis ha recorrido España de arriba a abajo para lograrlo. Compite en la categoría «Sprint» (750 metros a nado, 20 km en bicicleta y 5 km corriendo). «Han sido diez fines de semanas muy duros. Se me ha roto el coche, horas interminables de conducción, dos horas diarias de entrenamiento... Incluso he tenido que competir lesionado en Sevilla, pero no podía rendirme porque la causa merecía todo mi esfuerzo», confiesa.

Por ahora lleva recaudados 9.000 euros, y hasta hoy o mañana no sabrá, cuando le informen de las donaciones hechas, qué cantidad es exactamente, pero está emocionado por «las buenas personas que me he encontrado por el camino». Incluso ha recibido donaciones desde Inglaterra al enterarse de su reto: «Hay mucha gente que me ha dicho que cuando finalizase doblarían su donación, así que seguro que llegamos esta semana a los 13.200 euros», comenta el triatleta.

«La recaudación la hago de forma muy transparente. Yo no veo ni un euro porque el dinero va directamente a una cuenta de la Fundación», aclara Juan Luis.

Su familia al completo (padres, hermanos e hijos) le han apoyado en el «reto Pichón». De hecho, la carrera de Getxo «fue muy especial para mí porque uno de mis hijos me acompañó en la competición». «Me gusta decir que la vida es como un triatlón. No importa cómo (nadando, pedaleando o corriendo), pero siempre hay que seguir hacia adelante», concluye.

Álvaro ahora reconduce su vida en Miami

Álvaro Muñoz Escassi vive alejado de España y, sobre todo, de los medios de comunicación. Tras protagonizar las portadas de las revistas del corazón al anunciar que tenía una hija secreta veinteañera, Anna Barrachina, decidió aceptar la oferta de un jeque árabe y puso rumbo a Dubái para cuidar sus caballos y, también, para sentar la cabeza. Estando allí, recibió una oferta televisiva muy tentadora de una cadena italiana, pero decidió rechazarla porque su mundo y lo que más le llena son los caballos. Quería desconectar de su vida anterior. No quería saber nada de la televisión. En Dubái permaneció seis meses, durante los que conoció a la multimillonaria venezolana Raquel Bernal, la cual, según dicen sus allegados, le ha aportado mucha serenidad. Con ella lleva saliendo varios meses. Atrás quedaron sus múltiples conquistas y algún que otro escándalo. Actualmente, Álvaro vive en Miami y sigue volcado en el mundo equino, donde espera lograr futuros triunfos. Cabe destacar de él la buena relación que mantiene con su ex y madre de su hijo Álvaro, Lara Dibildos, con la que también vive ahora su hija Anna.