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La «jubilación anticipada» de Alejandro Sanz

El cantante acaba de presentar «No tengo nada», el primer «single» de su nuevo disco, y las fechas de sus próximos conciertos

Alejandro Sanz ayer, durante la presentación de su nuevo sencillo «No tengo nada»
Alejandro Sanz ayer, durante la presentación de su nuevo sencillo «No tengo nada»larazon

El cantante acaba de presentar «No tengo nada», el primer «single» de su nuevo disco, y las fechas de sus próximos conciertos.

No tiene nada que ver con el «I have nothing» (No tengo nada) de Whitney Houston, pero Alejandro Sanz ha presentado el primer «single» del que será su duodécimo disco y lleva por título el mismo que en su día puso la cantante estadounidense a una de sus canciones: «No tengo nada». Se podría decir que el artista tiene todo, el disco más vendido de la historia de la música pop, una trayectoria de casi 30 años de éxitos, miles de fans incondicionales y una familia a la que adora, pero él mismo asegura: «Cuando creemos que tenemos todo es cuando menos tenemos. Tener cosas no te hace dueño de nada».

Y es que, con esta canción quiere hacer referencia a aquella parte sentimental que nos enriquece como personas, porque Sanz lo tiene claro: «Prefiero un buen abrazo que una buena chaqueta». Además de un nuevo sencillo, ha presentado el videoclip del tema y ha anunciado las fechas de los próximos conciertos que se celebrarán en junio en Sevilla, Barcelona, Elche y Madrid. Cuatro ciudades confirmadas en las que se espera un llenazo absoluto, ya que, según una encuesta de Ticketmaster, el concierto de Alejandro Sanz es el más deseado de 2019. «Me encantan esas estadísticas», dice entre risas.

Porque sí, después de casi 30 años en la profesión el artista sigue agotando entradas en pocos minutos y llenando estadios haciendo frente a una nueva generación de artistas que crean música más comercial y pegadiza y que cuentan con el apoyo de las redes sociales y otras plataformas: «Hay muchos artistas muy grandes y hay sitio para todos. La música es tan necesaria como el comer y nosotros hacemos con ella versiones de una cosa que todo el mundo necesita: las emociones». Unas emociones que Sanz sigue creando aunque no sabe si por mucho tiempo más: «Si digo la verdad fantaseo un poco con la retirada, pero no lo quiero decir muy alto». No sabe si se debe al cansancio, pero «es que llevo casi 30 años y muy intensos. Antes los artistas hacían las giras más cortas y en espacios más reducidos, ahora es una locura. Pero no sé que haré».

Esta nueva generación de cantantes está encabezada por los concursantes de «Operación Triunfo». Una de las participantes de la actual edición cantó uno de sus temas: «Me encantó y me da igual si no lo hubiera hecho bien porque es un homenaje bonito que canten algo tuyo». Rosalía es otra de las jóvenes artistas que despunta en el panorama actual, de la que dice ser «una cantante increíble y talentosa» y de la que añade: «Ha conseguido hacer algo con su raíz flamenca que le da un extra de calidad a lo que está haciendo».

Rosalía no solo está triunfando por su música sino por su implicación con el empoderamiento de la mujer y el feminismo, algo con lo que Sanz concuerda: «La sociedad a veces despierta de determinados letargos y este tema es uno. No es una cuestión ideológica, es de nuestra especie. Necesitamos ponernos las pilas y ser mas ecuánimes porque estamos todavía en paños menores en cuanto a la igualdad se refiere. Hasta hace muy poco la mujer no podía votar en este país».

Un directo en YouTube

Las redes sociales han sido un papel fundamental en la promoción de «No tengo nada». Sanz publicó algunas frases del sencillo en Instagram e hizo un vídeo en directo en YouTube para comentar el videoclip. «Es que esto ya no es el futuro, es el presente. Las redes son más importantes en mi promoción que algunos medios convencionales. Vendimos las entradas del Calderón con un solo vídeo en mis redes en media hora». Unos perfiles que utiliza también para mostrar su día a día y a su familia.

De sus hijos publicó una vez: «No hago hijos, hago fotocopias», en referencia al gran parecido físico. Aunque prefiere que no sean tan parecidos porque «tengo muchos defectos». Dice que sus cuatro hijos tienen sus andares, pero lo que está claro es que han heredado es el amor por la música, ya que todos cuentan con ella en sus vidas: «La música es fundamental para la educación y si quieren ser músicos bien, pero sí quieren ser otra cosa también bien.

Aunque la música tiene que estar presente». Sanz comparte de vez en cuando fotografías de ellos, y a pesar de que Manuela, su hija mayor, alcanzará la mayoría de edad el año que viene, Alejandro Sanz no tiene miedo de la posible exposición de la joven en la Prensa: «Nosotros no nos movemos en determinado círculos, además se ha ido a vivir fuera y si yo veo cualquier cosa me encargaré de solucionarlo».

Una exposición a la que él si se ha visto sometido alguna vez, al igual que su amigo y compañero de profesión Miguel Bosé, que ha sido protagonista por su ruptura y la custodia de sus hijos: «Es lo que toca y no es plato de buen gusto, aunque a mí me suelen dejar en paz». Y además añade: «Si me hacen una foto, hago yo una y la cuelgo en las redes. Jamás he vendido nada de mi vida».