Las pencas se vengan de Bustamante

Ellas fueron las «celestinas» que planificaron el encuentro entre Paula Echevarría y Miguel Torres. Desde entonces, la relación se consolida cada día más.

Nadie sabe mejor que el grupo de amigas, llamadas Las pencas, lo mal que lo ha pasado su miembro más mediático, Paula Echevarría, desde que se separó de David Bustamante. La actriz mostraba su cara más sonriente en público, pero lloraba en silencio su desamor. Fue una de sus íntimas la que se confabuló con el resto del grupo para que Echevarría y Miguel Torres coincidieran en la fiesta de cumpleaños de una de ellas, Alicia Hernández. Todas hicieron de «celestinas» para que la pareja se sintiera a gusto, aunque pronto fueron testigos de su atracción mutua. Algunos ven esta «encerrona» como una venganza de las incondicionales contra Bustamante, ya que saben que el principal motivo de la ruptura del matrimonio son las amistades poco recomendables del cántabro y su actitud con su esposa. Ella le dio la oportunidad de que rectificara, pero no obtuvo una respuesta lo suficientemente adecuada como para salvar su relación.

El encuentro entre la «it girl» y el futbolista estaba muy planeado. Los dos se conocieron en el rodaje de un videoclip unos años antes. Y desde su encuentro en diciembre la relación se va consolidando cada vez más. Una amiga de la actriz, la periodista Cristina Tárrega, reconoce que ésta le confesó hace unos días que «se siente muy feliz» al lado del defensa del Málaga, y otro amigo, Dani Carande, habló esta misma semana con ella y le aseguró que se siente atraída por Torres porque «es más bueno por dentro que por fuera», dando por hecho que la relación es una realidad.

Al contrario de lo que se ha publicado, no existe ninguna cláusula que impida a Bustamante y a Echevarría mantener noviazgos hasta la firma del divorcio. Por eso no extraña que Ares Teixidó confiese ahora que su «affaire» con el cantante fue real y que la cosa acabó porque ella no fue capaz de gestionarlo. Una persona cercana a Bustamante nos dice, con ironía, que «David no tiene ganas de enamorarse, prefiere flirtear con ocho a la vez. No quiere comprometerse con ninguna».

Escapada rural

El pasado fin de semana el futbolista viajaba hasta Madrid con su equipo para disputar el partido de Liga contra el Leganés. Y a pesar de que se rumoreaba que Paula acudiría al campo pepinero para verlo jugar, no fue así. La todavía esposa de Bustamante prefirió marcharse con Las pencas de escapada rural al pueblo de Camaleño (Cantabria), donde se encuentra el Monasterio de San Miguel. Desde allí quiso hacerle un guiño al publicar en su Instagram una foto del recinto religioso con el nombre de «Miguel» en letras grandes. Fue el pasado lunes cuando la pareja tuvo finalmente su tercer encuentro conocido. Los paparazzis que persiguen a la actriz vieron cómo ambos entraban en un edificio que alberga apartamentos de lujo en la calle Génova de Madrid. Allí estuvieron diez horas e incluso pidieron que les llevaran comida para no tener que salir. A la salida fueron fotografiados por separado. Ella, en su Smart rumbo a su domicilio familiar; y él, hacia Atocha donde tomaría un AVE hacia Málaga. El apartamento en el que se citaron se alquila por meses e incluso por días. El futbolista lo tiene apalabrado por treinta días y según la agencia podría haber pagado más de 4.000 euros. Se trata de un dúplex de 130 metros cuadrados, con un dormitorio en el piso de arriba, y salón cocina y terraza en el inferior.

De momento, nada se sabe del presunto comunicado que Echevarría y Bustamante emitirán para anunciar su divorcio oficialmente. Hace unos días, y con cara de enfado, el cantante aseguró que no tenía previsto ningún comunicado. Parece que el principal punto de desacuerdo en la pareja para dar por terminado su matrimonio se refiere a la custodia de su hija Daniella. En un principio se habló de que la custodia la tendría la actriz y el artista cumpliría los regímenes de visita. Pero ahora éste podría estar pensando en solicitar la compartida, lo que conllevaría, además, llegar a un acuerdo respecto a temas económicos.