«Rocío Carrasco debe dinero a su tía Gloria Mohedano»

El cuñado de Rocío Jurado revela a LA RAZÓN los detalles de dicha deuda y afirma «rotundamente» que ellos no van a asistir a la boda de su sobrina

Rocío Carrasco anunciaba este miércoles en la revista «¡Hola!» la fecha de su boda con Fidel Albiac, que tendrá lugar el próximo 7 de septiembre, tras 16 años de relación. Será por lo civil y en una finca de Toledo. Nada más saltar la noticia la pregunta era obvia: ¿había invitado a sus familiares más directos? ¿Los llamó antes de la publicación para comentarles la feliz noticia? Sobre todo porque en dicha información dejaba claro que acudirán al enlace alrededor de 200 personas y que «Las Campos» (María Teresa, Terelu y Mari Carmen) sí que están invitadas. La respuesta es «no». Rocío Carrasco no ha llamado a su tía Gloria para comunicarle la fecha del enlace, según ha podido saber LA RAZÓN.

José Antonio, marido de Gloria Mohedano, asegura: «Ni yo, ni mi mujer ni mis hijas esperamos que nos invite». Y continúa diciendo: «Y si lo hace, nosotros no somos como los políticos, que decimos un «no» ahora y luego es un «sí». Si nos invita, nosotros no vamos a ir. Rotundamente, no». La guerra de los Mohedano con su sobrina Rocío se endureció tras la presentación del sello de la Jurado el pasado abril. Los familiares dieron plantón a la hija de «la más grande» por no invitar al acto a su hija Rocío Flores. «Desde entonces, no ha cambiado absolutamente na-da. Ni acercamiento ni nada», indica José Antonio.

El cuñado de Rocío Jurado asegura que la nieta de la cantante, Rocío Flores, «lo pasa muy mal con todo esto. Sobre todo, con los acontecimientos familiares; es en estos momentos cuando ella nota más la ausencia de su madre». José Antonio revela que hace poco «llamó a su madre. No para hacer las paces, sino por un hecho determinado. No hubo conversación y la contestación no la puedo decir...».

Hay que recordar que la nieta de Rocío Jurado eligió vivir en Málaga con su padre, Antonio David Flores, ya hace cinco años. «Olga la trata de maravilla, pero cuando lo piensa dice: “¿Qué he hecho yo para merecer esto?”», explica el marido de Gloria.

José Antonio cree que «lo mismo que es doloroso perder un hijo, también lo es perder una madre, y peor saber que está ahí y no quiere saber nada de ti».

José Antonio y Gloria Mohedano están muy molestos con la actitud que su sobrina lleva manteniendo con todos ellos los últimos años. «Hay un hecho que quiero desvelar. Rocío me tiene que pagar algo más de 3.200 euros». La historia es larga de contar, pero tiene relación con la Finca Los Naranjos. «Cuando fallece Jurado y se abre la herencia, para evitar que no nos llegaran los IBI y vinieran luego con recargos, yo los domicilié, tanto el del chalé de Chipiona como el de la Finca Los Naranjos. en mi casa», prosigue.

«Dijo que pagaría en mayo»

Los años fueron transcurriendo y decidieron regularizar la situación y registrar los catastros del chalet a nombre de su mujer y la Finca Los Naranjos, al de Amador y Gloria. «A finales de 2015 veo que me llega la cuarta parte del IBI de lo que estaba pagando hasta el momento. Me resultó extraño. Fui a preguntar al Ayuntamiento y me dijeron que hasta entonces había estado también pagando el de las fincas de Rocío Carrasco».

Gloria pidió un certificado que especificara las cantidades que habían estado abonando de más durante ocho años para hacérselo llegar a su sobrina. «La llamamos en octubre, le pedimos que nos diera un correo electrónico para enviarle el número de cuenta y el certificado y le comunico que el recibo de este año ya no lo pago yo. No me da su e-mail y me da el del notario. Y no tengo contestación –continúa José Antonio– hasta que nos llama para la invitación de la presentación del sello. Y ahí me dice que los 3.200 euros me los va a pagar en mayo. Será en mayo del año que viene...», comenta irónico, «porque el pasado mayo no ha abonado nada de nada». «Lo cuento ahora porque supongo que habrá obtenido un dinerito extra con la exclusiva», concluye.