¿Por qué tengo que comer polen?

Características: Es un suplemento natural que se obtiene de las abejas cuando recogen el polen de las plantas. Dicho de otro modo, el «polen de abeja» es el polen floral transformado por acción de las enzimas de la abeja. Su poder reside en sus propiedades reconstituyentes y nutritivas, que lo convierten en el aliado perfecto para incorporar a nuestro desayuno.

Cantidad y cómo combinarla: Se recomienda tomarlo por la mañana (una cucharada es suficiente, media para los niños) por ese poder revitalizante que tiene. Es importante tomarlo hidratado para que sea más fácil digerirlo y se puedan aprovechar bien todas sus propiedades nutricionales. Se recomienda en batidos, postres o ensaladas.

Contenido calórico: 100 g de polen de abeja aporta 250 kcal.

Para qué es bueno: Es muy rico en aminoácidos, carbohidratos, antioxidantes y enzimas digestivas. Y un excelente complemento para lucir una piel sana y bella gracias a su riqueza en betacarotenos. Por sus beneficios reconstituyentes, el está indicado para deportistas, en casos de anemia, para quienes realizan un esfuerzo intelectual importante cada día, para personas mayores, en casos de estrés y nerviosismo. Refuerza el sistema inmunológico, aumenta la hemoglobina, aporta gran cantidad de enzimas digestivas y ayuda a vencer el cansancio.

Alguna contraindicación: Las únicas conocidas son en personas alérgicas o pacientes con asma. En ambos casos, se recomienda tomar una pequeña cantidad como inicio para valorar la tolerancia.