Entrevista
Lali Espósito: “El amor es lo que me mantiene feliz y haciendo cosas”
La actriz ultima los detalles de su quinto disco, prepara uno de sus conciertos más especiales y nos anuncia proyecto cinematográfico
Si hubiera que buscar una característica que defina a Lali Espósito, quizá sea el atrevimiento, las ganas de intentarlo. En España, Sky Rojo (Netflix) la convirtió en un rostro más que familiar, pero a esta argentina no hay reto que se le resista. La interpretación es una de sus pasiones, pero la otra, la música, no se queda atrás. Canta, baila y compone.
El concierto está ya en marcha y va a coincidir casi con la salida de tu nuevo disco, que es el quinto, aunque para ese aún no hay fecha exacta de lanzamiento. Estamos con los últimos detalles. Yo soy pesada con cuestiones de sonido y estilos, pero ya está listo. Y sí, es el quinto. Con los discos lo que pasa es que primero tiene toda esa ilusión de algo que está empezando. El segundo y tercero son una resignificación de ese camino que empezaste. El cuarto es quizá como un disco raro, para experimentar, y el quinto, por lo menos en mi concepción en este momento, es un viaje por la parte creativa, por todo lo que aprendí hasta los 30.
¿Tanto se nota el cambio de década? Pero ¡claro! Es abrumador, aunque en el mejor sentido. También lo es en las cosas que no son tan buenas, pero para mí es increíble. Conecto mucho más con la persona que creo que soy y en la que me estoy transformando que cuando tenía 20 años. Me gusta mucho esta manera de ver la vida y empiezo a tener la revalorización de las amistades, las cosas que uno piensa... Este disco también habla de cuáles son los términos en que una quiere vivir el amor.
Precisamente el amor, o más bien el desamor, están de moda estos días. Y si no, que se lo digan a Miley Cyrus o a Shakira. Bueno, siempre se habló del desamor en las canciones, porque ¿quién no ha tenido uno? Pero sí, estamos en un momento de hablar de desamor en términos de mujeres.
En tu caso hablas más de lo que sucede después de ese desamor. Sí, y también del disfrute, como una cosa propia. Estamos siendo educados para sentir que se depende del amor de pareja. Creo que si escuchas este disco puedes sentir que hay una mujer detrás que está disfrutando de descubrir las cosas que le gustan, las que no, que existen diversas maneras de amar… Es un disco no tanto de corazón roto como de resiliencia, de educación. Yo siempre tuve noviazgos largos y estuvo bárbaro, pero siento que empecé a ser más sincera conmigo en los últimos años, así que este disco es una cosa muy de una misma, muy interna.
¿Qué cosas ama Lali Espósito? Yo amo mucho. Desde pequeña soy apasionada, muy soñadora, pero no desde ese lugar de lo onírico y lo que podría ser. Soy muy concreta en mis deseos.
Más que soñadora, entonces es que trabajabas para conseguirlo. Quizá por el contexto en que crecí en Buenos Aires, ya tendría que haber sido menos soñadora. Pero si miro atrás, me impacta. Yo no era tan consciente de las cosas que no iba a poder tener. Era muy de ¿y por qué no? El impulso del amor es lo que siempre me mantiene haciendo cosas y feliz. Yo amo mucho a la gente que amo. Le doy un riñón. Pero también siento que parece que cuando eres artista, si te va bien, la primera confusión es considerar que todo esto está pasando por ti solo y yo no creo que sea así. Tendrás tu talento, obviamente. Y yo considero que hago bien lo que hago cuando lo hago con ganas, pero eso no podría ser sin el motor del amor.
Podría decirse aquello de ‘Como no sabía que era imposible, lo hizo’. Te juro que miro para atrás y me doy cuenta de que no, nunca tuve esa sensación de que no iba a poder algo. Tenía esa inconsciencia y me llegaban esos mensajes, porque mi madre, a mis hermanos y a mí nos decía: “Ustedes pueden. Le pueden decir lo que sientan hasta al presidente, siempre que sean respetuosos y lo digan bien”.
Así has llegado a triunfar en dos ámbitos distintos, la música y la interpretación, donde has estrenado hace bien poco ‘El fin del amor’. Es un proyecto que cuando empecé a rodar me di cuenta de lo necesario que era para mí. Es una mujer de 30 años, filósofa, que parece que lo tiene que saber todo. Y en realidad no sabe nada, porque está desaprendiendo lo que le enseñaron. Que el amor no existe, que el amor romántico no es el amor. Y mientras la rodaba caí en cuán importante estaba siendo para mí este trabajo. Yo me siento muy representada por lo que estoy haciendo, tanto en la música como en la actuación. Además, ya puedo contar que ‘El fin del amor’ tiene su segunda parte.
Lo que sí ha terminado es ‘Sky Rojo’, además, con un final apoteósico. Ese proyecto llegó en un momento de la vida increíble. Me parece un desafío lo que la serie planteaba y fue muy valiente y era importante que en el mainstream existiera ese contenido y sentir que la trata, que es un tema horrible, se puede poner en ficción, porque mientras te estoy entreteniendo también te puedo contar otras cosas. Es un caballo de Troya. Y para mí, además, la pandemia me obligó a quedarme mucho más tiempo del que esperaba allá. Eso hizo que encontrara una gran familia. España hoy se siente como un segundo hogar. Es importante en mi trabajo, pero también dentro de mi construcción como persona.
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