La columna de Carla de la Lá

Las muertes violentas holllywoodienses son para el verano

Las muertes violentas holllywoodienses son para el verano
Las muertes violentas holllywoodienses son para el veranolarazon

Ahora sé queridos amigos que moriré un verano (la estación que menos me gusta) ya que tras una concienzuda investigación que en las líneas siguientes comparto con ustedes, he descubierto que los seres más bellos, glamurosos, atractivos y carismáticos siempre fallecen en vacaciones.

Comenzando por la malograda diva Marilyn Monroe, un 5 de agosto de 1962, Hollywood es fuente inagotable de tragedias y muertes sin resolver que curiosamente suceden en verano. A continuación, algunas de mis predilectas:

Fatty Arbuckle & Virginia Rappe: el verano de 1921 protagonizaron el primer gran escándalo en Hollywood. Supuestamente, ella habría muerto desangrada a causa de un violento ataque sexual por parte de la mayor estrella del cine mudo Roscoe Arbuckle durante una fiesta que ofreció en el St. Francis Hotel de San Francisco. Se habló de prácticas aberrantes pero tras tres juicios por homicidio, Arbuckle fue exculpado aunque ha pasado a la historia por violar con una botella y provocar la muerte de la actriz. En todo caso, fue expulsado de la industria y murió alcoholizado a los 46 años.

Rodolfo Valentino: falleció de peritonitis el verano de 1926, con sólo treinta y un años. De origen italiano, encarnó la imagen del latin lover en el cine americano de los veinte. Tras vivir en Italia y Francia, emigró a Estados Unidos donde fue contratado por la Metro Goldwyn Mayer. Miles de fans en todo el mundo suspiraban por el galán de mirada profunda que sabía bailar tango y que protagonizó películas como El Caíd, La dama de las camelias o Sangre y arena. A Su funeral asistieron cerca de 100.000 mujeres, entre las que algunas llegarían incluso a suicidarse por su ídolo.

El “pequeño bastardo”: Así era como James Dean, “Rebelde sin Causa”, llamaba a su Porsche Spyder 550 con el que perdió la vida en septiembre de 1955. El 17 de septiembre (unos días antes) realizó una publicidad en la que concientizaba a los jóvenes a conducir con precaución. Dean se incrustó frontalmente contra un Ford por la izquierda y perdió la vida instantáneamente. El conductor del Ford solamente se rompió la nariz. Algunos investigadores creen que fue un suicidio: por un lado no entienden por qué Dean no esquivó al vehículo con el que colisionó y sus amigos notificaron lo extraño del caso, pues antes de morir se presentó misteriosamente ante ellos vestido con un traje oscuro, nada habitual en su vestimenta.

El primer Superman: George Reeves murió el 16 de junio de 1959 a causa de un disparo en la cabeza. Oficialmente se suicidó a los 45 años en su habitación mientras en el salón se celebraba una fiesta pero muchas teorías aseguraron que no. Los testimonios de los testigos, todos borrachos, solo añadieron confusión a un supuesto suicidio lleno de incongruencias. Los rumores apuntaron a que Eddie Mannix, vicepresidente de la Metro-Goldwyn-Meyer, contrató a unos mafiosos para que le matasen. El actor había tenido una aventura con la mujer de Mannix, Toni, pero rompió la relación y Eddie, quien conocía y consentía esta infidelidad, quiso vengarse de Reeves por romperle el corazón a su esposa. Reeves interpretó a Superman durante seis años en la televisión pero su debut tuvo lugar en “Lo que el viento se llevó”, donde interpretó a uno de los gemelos Turletton que coquetean con Escarlata.

Montgomery Clift: cuentan los mentideros que tras el famoso accidente de coche que sufrió en 1956 Liz Taylor le abrió la boca, le metió los dedos y le sacó dos dientes que se le habían quedado incrustados en la garganta. Los médicos pensaron que era un milagro que hubiese sobrevivido pero ese día comenzó lo que llaman “el suicidio más largo de la historia de Hollywood”. Clift necesitó una extensa cirugía reconstructiva en la cara y volvió después de varias semanas para terminar la película con aspecto desfigurado. A partir de entonces, quedó totalmente enganchado al alcohol y a las píldoras contra el dolor, y su salud se deterioró hasta acabar muriendo debido a un ataque cardíaco. El 23 de julio de 1966 Clift aparecía muerto en su piso de Nueva York a causa de un abuso continuado de alcohol y drogas. Tenía 45 años.

Jayne Mansfield: la actriz que quiso ser Marilyn Monroe tenía 34 años cuando murió el 29 de junio de 1967 al estrellarse su automóvil con la parte trasera del remolque de un camión. Se dijo que acabó decapitada por algunas fotos difundidas por la prensa sensacionalista en las que se veía su peluca rubia sobre el asfalto. El organismo regulador de la seguridad vial obligó a instalar una barra parachoques en la parte inferior de los remolques de tractor. En Estados Unidos, este tipo de protección se llama ‘barra Mansfield’.

Judy Garland: el 22 de junio de 1969 la estrella de El mago de Oz y Meet Me in St. Louis fue hallada muerta a los 47 años de una sobredosis, probablemente accidental. La madre de Liza Minelli murió en su apartamento de Londres. Mickey Deans, su esposo durante sólo tres meses, encontró su cuerpo en el baño desplomado en el inodoro y con la cabeza apoyada en sus manos. Ahora descansa en un nicho en Hollywood Forever, no lejos de Rodolfo Valentino.

Sharon Tate: El 9 de agosto de 1969, los seguidores de Charles Manson entraban en el 10050 de Cielo Drive, en Beverly Hills, y terminaban con la vida Sharon Tate y sus invitados. Actriz y esposa del director Roman Polanski, la sangrienta manera de acabar con su vida -fue apuñalada 16 veces- siguen fascinando y horrorizando al público. Apenas le faltaban dos semanas para dar a luz el día de su muerte. Los asesinos fueron condenados a cadena perpetua.

Bruce Lee: murió el 20 de julio de 1973 y su muerte guarda un halo misterioso y mítico. Muchos sostienen que el legendario actor de artes marciales fue asesinado por un maestro de kung fu mediante la técnica de “dim mak” o “toque de la muerte” popularizada por Tarantino en Kill Bill; consiste en un golpe certero en una determinada parte del cuerpo, que causa la muerte días después sin que la víctima sepa la causa.

Dorothy Stratten: el 14 de agosto de 1980, conocida como Galaxina, el título de la película de ciencia-ficción de serie B que protagonizó antes de su muerte, Dorothy Stratten fue asesinada a los 20 años, atada a un banco de abdominales y violada (en ese orden) por su exmarido. Con una escopeta le pegó un tiro en el rostro y prácticamente la dejó sin cabeza. Después practicó necrofilia con el cadáver antes de volarse la cabeza también. El fundador de 'Playboy', Hugh Hefner, se vio salpicado por la controversia. Una de las películas más aclamadas de la década del 80, Star 80, se basó en la corta vida de la actriz.

Grace Kelly: la musa de Hitchcock murió en Mónaco el 13 de septiembre de 1982, a los 52 años en un accidente de coche mientras viajaba desde su casa de campo hacia Mónaco. En el momento del choque iba con su hija Estefanía, de 17 años en su todoterreno Rover P6. Aunque la versión oficial dijo que la princesa de Mónaco conducía, existen teorías que aseguran que el volante lo llevaba su hija, menor de edad y que perdió el control del coche tras una discusión con su madre. El automóvil se precipitó por una ladera montañosa. Grace fue rescatada viva de entre los restos pero murió al día siguiente en el Hospital Central Princesa Grace.

Margaux Hemingway: la bellísima actriz de 41 años se suicidó con tranquilizantes y fue encontrada en su casa de Santa Mónica el 1 de julio de 1996. Un tristísimo historial de depresión, alcoholismo y trastornos alimentarios parece acompañar a esta familia. Así, la nieta de Ernest Hemingway coincidió, voluntariamente o no, con la fecha del suicidio de su abuelo, que 35 años antes, el 2 de julio de 1961, se disparó en la cabeza. También se suicidaron, con apellido Hemingway, el padre del Premio Nobel de Literatura y dos hermanos.

David Carradine: el 3 de junio de 2009 muere misteriosamente; se dijo que se había suicidado ahorcándose en un hotel de Tailandia pero después su manager afirmó que la muerte se habría producido por causas naturales. Informaciones posteriores indicaron que la muerte fue accidental por asfixia autoinfligida o autoerótica con el fin de aumentar su estimulación durante una masturbación. Más tarde se habló de asesinato pero la teoría del juego erótico cobró fuerza de nuevo cuando un diario tailandés aseguró que Carradine fue encontrado con peluca de mujer y ligueros.