Bienestar

Las claves para afrontar la menopausia durante el otoño

Se trata de una de las estaciones del año donde sus síntomas pueden verse más agravados. Te contamos las soluciones para construir una rutina de bienestar y amor propio

Escena de la película 'Bridget Jones'.
Escena de la película 'Bridget Jones'.Gtres

Cuando el cambio estacional se acerca notamos una serie de cambios. Lo vemos con la caída del cabello o, también, en nuestro propio cuerpo debido al vaivén de hormonas que provocan sofocos, falta de vitalidad, alteraciones del sueño o de estado de ánimo. Sobre todo, estas sensaciones se agravan o evidencian a las mujeres que están pasando por la menopausia hasta conocer la astenia otoñal, un estado que destaca por el cansancio o la falta de energía, entre otros síntomas.

De la misma manera que septiembre, octubre es un mes de cambios, en el que nos adaptamos a nuevas rutinas y ritmos. A todo ello, los síntomas que comentábamos anteriormente pueden verse afectados también por las variaciones climáticas propias de esta estación de año, como el hecho de que atardezca más pronto. No obstante, al ser unas semanas de retos, también es el momento de afrontar dicha situación y proponernos nuevas metas o rutinas que hagan sentirnos mejor con nosotras mismas. Entre ellas encontramos cuidar nuestra alimentación, también nuestro cuerpo con deportes que no exigen un esfuerzo mayor o tener un horario de sueño. Y es que, como decimos, la buena noticia es que existen claves o consejos que podemos seguir para afrontar la menopausia este otoño.

Regular la temperatura corporal

Debido a los sofocos, uno de los síntomas más comunes de la menopausia, deberemos regular la temperatura corporal en base al cambio de grados durante el otoño. ¿La solución? La más rápida y eficaz sería vestir por capas para tener la facilidad de poner y quitar tantas prendas como necesitamos. A todo ello, evitaremos los tejidos sintéticos (porque retienen la calor) para apostar por aquellos más naturales, como el algodón o la lana merina, entre muchos más.

Hacer movimientos o deporte ligero

A la misma vez, siempre es recomendable hacer movimientos o deporte ligero en el día a día, pero nunca poniéndonos en riesgo y siempre apostando por el propio bienestar. Podemos salir a andar rodeados de la naturaleza o hacer clases de barre, pilates o yoga, aquellos que nos permiten movimiento y flexibilidad sin demasiado esfuerzo.

Mujeres haciendo deporte.
Mujeres haciendo deporte.Pexels

Cuidar la salud mental

Como tendremos un vaivén de estados de ánimo, también es de vital importancia comenzar a cuidarnos por dentro. Los ejercicios de los que hablábamos antes nos ayudarán a tener un equilibrio mental, de la misma manera que practicar la meditación para librarnos de preocupaciones o pensamientos intrusivos. También, disfruta de los pequeños placeres que te hacen feliz: escribir un journaling, leer, escuchar música u otros.

Controlar el sueño

Al ser los días más cortos, la melatonina se altera y nos cuesta conseguir más el sueño, nos desvelamos o tenemos sofocos durante la noche. Por ello, debemos seguir unos sencillos consejos que marcarán la diferencia en tus horas de descanso. Una de ellas sería tener un horario bien estructurado o regulado, puesto que si siempre nos vamos a dormir a una misma hora, conseguiremos crear una rutina. También tiene que ver con lo que cenamos, se recomienda hacerlo antes y con alimentos que no pesen y ligeros. Si aún así te cuesta entrar en la fase REM, apóyate en los suplementos alimenticios de magnesio, triptófano o melatonina.

Mujer durmiendo.
Mujer durmiendo.Pexels

Una alimentación antiinflamatoria

Como decíamos, debemos mantener una alimentación equilibrada, con efecto antiinflamatorio y rica en fitoestrógenos (que ayudan a compensar parcialmente la disminución de estrógenos naturales). En este momento prevaleceremos las frutas o verduras frescas, las grasas saludables, las proteínas magras, los frutos secos o los cereales integrales, entre muchos más. Sobre todo, evita el exceso de café, alcohol y azúcares, que pueden agravar la irritabilidad o los sofocos.

Con estos consejos afrontar la menopausia no se hará una tarea imposible. En sí, se trata de un proceso de avanzar con pequeños, pero constantes, pasos para alcanzar el bienestar con nosotras mismas.