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Descubrimos cómo se hizo el vestido de madrina más aplaudido de Carolina Molas para la boda de su hijo con Tamara Falcó

La cuenta de Instagram de Lorenzo Caprile ha mostrado todo los detalles del diseño.

Carolina Molas, sorprendida, desmiente con una sonrisa su mala relación con Isabel Preysler
Carolina Molas, sorprendida, desmiente con una sonrisa su mala relación con Isabel PreyslerEuropa Press

Seguimos a vueltas con la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva después de descubrir la exclusiva y analizar todos los vestidos. De los vestidos de novia de Tamara Falcó, al vestido de Isabel Preysler o al de Ana Boyer, o al vestido de madrina perfecta de Carolina Molas que ahora hemos podido descubrir gracias a Lorenzo Caprile. La madre de Íñigo Onieva se ha coronado como la mejor vestida según las redes sociales, con un diseño de Lorenzo Caprile hecho a medida, que el lunes no os pudimos enseñar porque estaba en el interior de la revista ¡Hola! y nosotras no pirateamos y respetamos el trabajo de nuestros compañeros. Un diseño que parece de Alta Costura en un favorecedor azul cobalto, largo como manda el protocolo por ser una boda de tarde y además la madrina, cuenta con unos plisados en la zona del pecho hechos a mano que le aportan una máxima elegancia y que ahora podemos descubrir en detalle gracias a los vídeos y fotografías que han publicado en la cuenta de Instagram de 'Taller Caprile'.

Un vestido de Carolina Molas confeccionado en gasa de seda azul marino con un favorecedor plisado, escote en V y delicada pedrería en la cintura que creaba un efecto 'cintura de avispa' con una falda fluida que daba mucho movimiento al vestido. Con un diseño, que según las redes sociales, Carolina Molas ha eclipsado a Isabel Preysler que ha optado por un diseño más boho de estampado floral, mucho menos clásico. Eso sí, para una boda en un jardín en pleno julio, a nosotras nos parece mucho más apropiada la opción de Isabel, tanto en corte, patrón y estampado.

Además, el vestido contaba con unas mangas semitransparentes y ligeramente abullonadas acabadas en puño, que nacían de unas originales hombreras fruncidas. ¡Una maravilla de diseño!