Moda

Lo estás haciendo mal: no sabes la talla correcta de sujetador

Ocho de cada diez mujeres no usan la talla correcta de sujetador. Según los expertos, un error de centímetros puede afectar la postura, la comodidad y hasta la salud

Lo estás haciendo mal: no sabes la talla correcta de sujetador
Lo estás haciendo mal: no sabes la talla correcta de sujetadorUnsplash

El primer prototipo de sujetador apareció en 1914, cuando la estadounidense Mary Phelps Jacob patentó una prenda ligera hecha con dos pañuelos y una cinta en respuesta a la rigidez del corsé victoriano. Con el paso de las décadas, el sujetador dejó de ser solo una pieza funcional para convertirse en un básico del vestuario femenino, vinculado tanto a la moda como a la emancipación de las mujeres del siglo XX.

Más de cien años después, el sujetador se ha transformado en una prenda casi universal. Sin embargo, un dato sorprende: el 80% de las mujeres no sabe cuál es su talla correcta.

El problema actual: más que una cuestión estética

La mayoría de las mujeres compra la misma talla durante años, a veces por costumbre, otras porque las tallas cambian según la marca o el país. Pero la realidad es que el cuerpo femenino no es estático: la edad, el peso, el embarazo y hasta los cambios hormonales pueden alterar tanto el contorno como la forma del pecho.

Usar la talla equivocada no solo es incómodo; puede provocar dolores de espalda, marcas en la piel, falta de soporte y una silueta menos favorecedora bajo la ropa. Por eso, los expertos recomiendan medirse al menos una vez al año o cada vez que haya cambios físicos significativos.

Cómo calcular tu talla correcta, según Intimissimi

La firma italiana propone un método sencillo para hacerlo en casa. El primer paso es medir el contorno justo por debajo del pecho, manteniendo la cinta métrica lo más ajustada posible. Si el pecho es firme, puede hacerse sin sujetador; si no, conviene llevar uno sin relleno para que la forma sea más natural. Esa cifra, redondeada al múltiplo de cinco más cercano, será la medida del contorno.

El segundo paso es medir la parte más prominente del busto, la copa. Esta vez con la cinta bien sujeta pero sin apretar demasiado. Después, se resta la medida del contorno a la del busto. La diferencia indica la copa: si hay entre diez y doce centímetros, corresponde a una copa A; entre doce y catorce, a una B; entre catorce y dieciséis, a una C; entre dieciséis y dieciocho, a una D; y así sucesivamente, aumentando dos centímetros por cada talla adicional.

Por ejemplo, si el contorno mide 75 centímetros y el busto 90, la diferencia es de quince centímetros, lo que correspondería a una copa C.

Medirse es cuidarse

Saber tu talla correcta no es un capricho de moda. Un sujetador bien elegido puede mejorar la postura, evitar molestias y dar una mejor forma a la ropa.