Melody conquista Europa como toda una diva andaluza: bata de cola, sombrero cordobés y un body de espinas plateadas en Eurovisión

Una diva valiente, y poderosa. Y así ha sido Melody sobre el escenario del estadio St. Jakobshalle, conquistando a toda Europa, como sabíamos que iba a pasar en esta gran final de Eurovisión 2025. Porque quedemos en el puesto que quedemos, la sevillana se ha comido el escenario como solo ella sabe con su vozarrón, una gran puesta en escena, y un vestuario cuidado hasta el último detalle. De esta manera, la cantante ha lucido un look que seguro que será historia del festival, y de la moda de nuestro país; como ya hizo el Courregès de Massiel o el Palomo Spain de Chanel Terrero.

Melody ha lucido un conjunto exclusivo y realizado a medida está firmado por el diseñador alicantino Gustavo Adolfo Tari, que es pura diva andaluza. Un creativo reconocido especialmente en el sector del espectáculo, el teatro y las grandes producciones, que, más allá de llevar sus creaciones al Gran Teatro Liceo, ha vestido a artistas de la talla de Shakira, Rosalía, Tini, Nathy Peluso, Bad Gyal o Karol G.

Los tres looks (en uno) de Melody en Eurovisión

El vestuario con el que Melody deslumbra en Eurovisión 2025 lleva la firma del diseñador Gustavo Adolfo Tarí. Se trata de una propuesta pensada para potenciar su imagen de diva contemporánea sobre el gran escenario europeo. Una de las piezas clave es un body de pedrería espectacular, con más de 15.000 cristales, con flecos, brillos y un intenso protagonismo del color plata". "Está lleno de artesanía, que es mi fuerte. Se ha hecho en dos semanas, desde que empezamos a confeccionar. Calculo unas jornadas de 14 horas durante 14 días, es decir, unas 196 horas de trabajo. Y en algunos momentos fuimos hasta cinco personas trabajando al mismo tiempo”, explica el diseñador.

La actuación de nuestra diva ha comenzado con un vestido negro de volantes que reinterpreta la tradicional bata de cola andaluza, una conexión directa con las raíces sevillanas de la cantante. De silueta estructurada, sus volúmenes evocan las espinas de un rosal, en alusión a la letra de la canción, que se completa con un sombrero cordobés de ala ancha que aporta un aire de sofisticación.

Bajo esa impresionante bata de cola se escondía un segundo look, un vestido negro con hombreras afiladas que mantiene el dramatismo con un toque de elegancia, de una diva doliente, como dice la canción.

Y finalmente, el body plateado con el que Melody ha brillado como ella solo sabe, y nos ha recordado, inevitablemente, a Chanel. ¿El resultado? Un body plateado de pedrería, conformado por un total de 15.000 cristales bordados a mano y con puntas, a modo de espinas, en los hombros y las caderas... “Es la diva de hoy en día, la del gran escenario, la que podría estar cantando en Nueva York, en Las Vegas, en Los Ángeles o en cualquier gran escenario”, ha explicado Raúl Amor, figurista de RTVE.

Además, Melody no ha dejado ningún detalle al azar: incluso el micrófono que utiliza en escena, si ese que al final lanza al aire, está decorado con pedrería, en sintonía con el resto de su vestuario.