¿Qué hacías el 1 de noviembre de 2003?

Esa mañana Letizia se levantó muy temprano. Cuando llegó al umbral de su urbanización el portero, Gaspar Abascal, le interrogó sobre el madrugón. «Voy a una cosa importante», le dijo la periodista. Esa misma tarde, Zarzuela corroboraba lo que horas antes era una bomba en las redacciones: el compromiso del heredero de la Corona, Felipe VI, y Letizia Ortiz Rocasolano. 15 años y dos infantas después, algunos de los rostros más famosos del país nos desvelan cómo vivieron ese día y cómo les ven tras un quinquenio de reinado

Nuestra campeonísima de todo siempre que hay agua de por medio, asistió a la coronación de Felipe VI y todavía recuerda con cariño el último mensaje de los Reyes, felicitándola por «volar en el agua» en los pasados Mundiales de Budapest, donde fue oro. En un parón de su entrenamiento en las Islas Canarias, Mirea, de 27 años, ensalza con verdadera convicción el trabajo de los monarcas desde 2003: «Nuestros Reyes están representando la serenidad en una sociedad compleja y cambiante. Yo, como deportista de élite, valoro muy positivamente su papel de embajadores de nuestro país en el concierto internacional».

Sus «Pretty Ballerinas» disparan las ventas cuando quienes las pasean son la Reina y sus hijas, como el reciente 12 de Octubre. Sin duda, una razón más para que la empresaria menorquina, adalid de la lucha contra el decretazo en su isla, no disimule sus simpatías por los inquilinos de la Zarzuela: «Me pareció una elección muy buena de Don Felipe. Inesperada, pero fantástica». Si se trata de ponerles nota ahora, tanto estética como laboralmente, tienen su visto bueno: «Ella es una mujer súper elegante y él, un Rey guapísimo. Pero, sobre todo, su trabajo es importantísimo para España. Son unos grandes embajadores».

«Estaba en Roma, en la ópera, me acuerdo perfectamente, cuando se anunció el enlace», reconoce la cara visible del programa «Corazón, corazón». Su amistad con Felipe VI se cuenta ya por décadas, las más de dos que hace que no cuajó su «affaire» con Álvaro Fuster, íntimo amigo del que entonces era Príncipe. Anne es ahora una mujer y madre feliz junto al venerado director de orquesta Pablo Heras, al que los Reyes arropan cuando acude al Teatro Real. «Han hecho muy buen equipo. Desde que conocí a Felipe VI, cuando me preguntaban por él siempre decía: “Será un fantástico monarca”, y se está cumpliendo».

Periodista y contemporánea a Doña Letizia, la presentadora de «Espejo Público» cuenta cómo vivió las horas previas al compromiso, cuando los rumores hicieron que se precipitara el anuncio: «Era fin de semana y me llamó una amiga cercana a TVE. No se lo creía. Meses atrás había coincidido con Letizia y hablamos del embarazo de mi primer hijo». Tras la anécdota, Griso valora su proyecto en común estos 15 años: «El principio de su reinado no podía ser más convulso. Ahora toca reconectar emocionalmente con una Cataluña frustrada por el independentismo. No será fácil, pero los retos que marcan un reinado nunca lo son».

Fue uno de los más del mil testigos del lluvioso enlace en la catedral de La Almudena aquel 22 de mayo de 2004, tras el cual reveló haber salido tan satisfecho por compartir mesa con Sofía de Habsburgo como hambriento «porque estoy acostumbrado a las bodas cántabras». Con la misma sinceridad, el presidente de Cantabria analiza el «status quo» de los Reyes: «Yo no soy monárquico, pero les veo bien, el Rey se ha consolidado, está bien valorado y haciendo un papel muy correcto. Tengo buena imagen de su trabajo. Igual que del de la Reina. Saben que les toca ser ejemplares y lo están siendo».

En un documental para Telemadrid el pasado enero, le hicieron tirar de memoria y afirmó que Doña Sofía «había entrado un poquito en pánico» tras el anuncio del noviazgo de los Reyes. Diez meses después, nos desvela otros detalles de la madre de Felipe VI: «Cuando se fraguó el compromiso, la Reina llamó a mi madre y le pidió venir a mi casa con la familia. Yo creo que necesitaba el apoyo de mi madre, que se lo dio. Ahí conocimos a Letizia». Fiel defensor de Felipe VI, el conde de Salvatierra insiste: «El Rey ha acertado en todas las decisiones. Cada día se le ve más maduro. Es todo un privilegio para España».

«Me impactó el anuncio. Para cualquiera era impensable. Mi reacción fue ésa, sorprenderme», admite el presentador y cantante. Del asombro inicial, Bertín pasó al reconocimiento a Felipe VI: «Tenemos un rey grandioso, con mucha personalidad, saber estar, serio, súper formado... Es inmenso, no solo por su tamaño». Respecto a Doña Letizia, se abraza a aquello de que las comparaciones son odiosas: «Ella tiene el hándicap de que viene detrás de una Reina inmensa, Sofía, y seguir su estela es muy difícil. Se está adaptando y cambiará aún más en el futuro. Se tendrá que ver hasta qué punto es capaz de renunciar a cuestiones personales».

«Días antes les vimos en el restaurante Landó», revela inesperadamente la empresaria cuando le cuestionamos sobre el anuncio real, y continúa: «La noticia me dio mucha alegría. La primera impresión fue buena. Me vienen a la cabeza dos imágenes, cómo iba vestida la Reina en la pedida y en su boda, impecable de Pertegaz». Al hacer balance de este quinquenio, Fiona aborda primero el estilismo, «pues Doña Letizia podría caber hoy en la misma talla con la que se presentó» y luego al patriotismo: «Lo más importante es que deben conseguir la unidad de España y, sin duda, lo están haciendo muy bien».

Recibió de Don Felipe y Doña Letizia la Medalla de Oro de Asturias en 2014. Sin embargo, el mejor galardón del fundador y presidente de Mensajeros de la Paz lo había recibido años atrás, según reconoce: «El día que se anunció el compromiso yo estaba saliendo de una residencia nuestra. ¡Me puse tan contento! Dije: “Qué bien, vamos a tener una reina asturiana”. Además, llevo con mucho orgullo ser amigo de su abuela Menchu. De hecho, pienso que debería ponerlo en mi tarjeta de presentación», bromea. Cuando se trata de valorar a los Reyes este tiempo, es tajante: «Solo les preocupa ayudar a los demás».

El humorista se pone en modo Roberto Brasero para recordar el «sí, quiero» de los Reyes seis meses después del anuncio: «Qué rabia me dio que les lloviera cuando en el ensayo había lucido el sol. Los “príncipes falsos” eran bendecidos por un día maravilloso mientras a los reales les caía un chaparrón». Y continúa: «No fue un mal augurio, porque en su reinado están brillando. Sin embargo, algo me perturba. Coincidí con la Reina y me confesó que era seguidora nuestra. Me sentí honrado, pero no pude evitar reflexionar: ¿será bueno que los Monarcas estén expuestos a tontunas de gran calibre?».

El 2 de noviembre aterriza en Madrid para dirigir el concierto en honor de la Reina Sofía (que ya podrá decir que los 80 son suyos). Sin embargo, es desde Corea desde donde el gran tenor nos hace llegar su crónica del quinquenio real: «Quiero agradecerles que hayan estado al servicio de España y de los españoles respetando la Constitución del 78, mostrando lo mejor de nuestra tierra, estando en los triunfos y sintiendo nuestros duelos como propios y, además, pedirles que sigan sirviendo con la misma calidad y entereza y garantizando la concordia, la convivencia y la unidad nacional».

Siempre cercana, la modelo admite acordarse a la perfección de la buena nueva del noviazgo real «porque el día que se contó daba igual donde estuvieras. No se hablaba de otra cosa». Sandra, volcada actualmente en la creación de un registro de supervivientes del cáncer que ella misma superó en dos ocasiones, tira de historia para ponderar a Felipe VI y a la mujer con la que se casó: «La institución pasa por el momento más complicado desde el 23- F y, la gestión del Rey, con determinación y cercanía, no solo le ha dado modernidad a la Corona sino que además la ha reforzado».

La presentadora es una de las que, como muchos otros, no recuerda dónde estaba en el exacto momento del anuncio del enlace, pero sí su primera impresión de la elegida por Felipe VI: «Me sorprendió gratamente que nuestra futura Reina fuera una persona a la que admiraba como compañera del medio». Luego ha compartido con ella listas de estilosas y con el Rey, finales de Liga de Campeones. «Después de estos 15 años, estoy encantada de ver la familia tan bonita que han formado, su naturalidad y cercanía con los españoles y, por supuesto, orgullosa de cómo representan a nuestro país», concluye.

El protagonista de «Presunto culpable» nos desvela con quién compartió las primeras confidencias del compromiso real: con una «tata», la suya, muy ilusionada: «A mi abuela le encantaba que el Príncipe se fuera a casar y me estuvo enseñando fotos de cuando era muy pequeño». Quince años después, el actor, sano y salvo tras participar en la maratón de Chicago, admite haber compartido varios momentos con los Reyes: «Les veo serenos, calmados, y muy simpáticos y empáticos con la gente que tratan. No somos amigos, pero sí hemos hablado y siempre me han parecido unas personas estupendas y muy cercanas».

«Me sorprendió la naturalidad y la tranquilidad de Letizia en los primeros momentos tras el compromiso y, sobre todo, ese “déjame terminar”, mandando callar a Don Felipe. Ella no iba a ser una mujer florero y así lo ha demostrado después, con sus discursos y su trabajo», defiende la periodista y escritora. Su relación con los Reyes ha sido estrecha: «Me tratan como a una hermana pequeña», y sus palabras rezuman agradecimiento y, ante todo, cariño: «Toda la familia, desde la Reina a la Infanta Elena, se han interesado siempre mucho por mí. Pienso que son los mejores representantes que podríamos tener».