Andalucía

Es tierra de arte. Desde el duende de Lola Flores a la gracia universal de Chiquito de la Calzada. Desde el verso de Federico García Lorca a los de Alexandre o Luis Cernuda. De la guitarra que brota entre olas almerienses de Tomatito hasta las notas de la sublime sonanta de Paco de Lucía. De los excelsos pinceles de Velázquez y Murillo a la personalidad infinita y surrealista de Picasso. De la torería de Joselito El Gallo a la entrega de Manolete; desde Pepe Hillo hasta el maestro de Ronda, Antonio Ordóñez, y el Faraón de Camas, Curro Romero. Tierra de un borriquillo llamado “Platero”. De un gitano rubio que hizo tambalear las columnas del cante flamenco al que apodaron el “Camarón”. Del “Amor brujo” de Manuel de Falla. Del estilo regionalista de Aníbal González. Andalucía es tierra de culturas. Por aquí pasaron los almorávides, bereveres y nazaríes. Hasta aquí llegaba el oro del nuevo mundo. Fue, también, cuna de emperadores romanos -Trajano y Adriano- o de personalidades de la talla de Séneca o el Gran Capitán. Es santuario de la gastronomía: del gazpacho de la mejor dieta mediterránea, de la dorada manzanilla de Sanlúcar, del aceite de los olivares jienenses, del jamón de la sierra de Huelva... Es el capote de Rafael de Paula, el trote de un caballo cartujano, la embestida de un toro en el redondel. Es una copla de Juanita Reina, un poema de Gustavo Adolfo Bécquer o el sombrero de Julio Romero de Torres. Es el más bello milagro de Fray Leopoldo y Santa Ángela de la Cruz. Paz, sol y talento. Es uno de los pueblos más cultos del mundo, porque es uno de los que tienen mayor riqueza e historia.. Andalucía es España. Y estamos orgullosos de ser andaluces y españoles.