Caja Rural del Sur aumenta su beneficio un 50%, el segundo mejor resultado de su historia

La entidad obtiene un resultado bruto de 47,6 millones con 120 millones más de inversión, 237 millones más de depósitos, ocho millones menos de gastos y 73 millones menos de morosidad

El director general de Caja Rural del Sur, Guillemo Téllez, y el presidente José Luis García-Palacios Álvarez se han estrenado en su primer ejercicio completo al frente de la entidad con los segundos mejores resultados de la historia de la misma, al lograr un incremento del 50% en el beneficio bruto que alcanzó en 2018 los 47,6 millones y los 35,1 millones en térnimos netos (frente a los 26,9 del año anterior).

Para ambos directivos, las claves de estos resultados han sido la contención de la caída de los ingresos financieros por la bajada de los tipos de interés, la apuesta por productos como los seguros que permiten a la entidad cobrar más comisiones, la disminución del gasto "sin despedir a nadie que nos ha nivelado el margen de explotación"y, sobre todo, la reducción de la morosidad en dos puntos (del 7% al 5%), que en total representan 102 millones menos en dudosos y activos improductivos que "han aportado 14 o 15 millones a la cuenta de resultados".

Entre las principales cifras destacadas durante la presentación pública de la cuenta de resultados, que fue aprobada ayer por unanimidad en la Asamblea General, ambos destacaron el aumento en la inversión crediticia en un 2,97%, "superior a la media del sector financiero", al pasar de 4.038 millones en 2017 a 4.158, así como el crecimiento de los depósitos en un 4,62% (de 5.125 millones a 5.362), lo que Téllez y García Palacios Álvarez interpretan como "un respaldo de nuestros socios y clientes a la que gestión que estamos llevando".

Así el volumen yotal de negocio al cierre de 2018 fue de 10.505 millones frente a los 10.152 de 2017.

La reducción del 7 al 5% en la morosidad, sobre todo con la bajada del 25% en activos improductivos, ha permitido a la entidad cerrar el ejercicio con una cobertura de insolvencias del 123%, más del doble de la media del sector, lo que da "solidez y estabilidad para años venideros". Es decir, la entidad tiene colchón suficiente para cubrir todos los impagos que se pudieran producir y aún le sobraría dinero que Caja Rural del Sur no apunta como beneficios porque apuesta por la "estabilidad". Sí prevé que ello permita un incremento importante de inversiones en el presente ejercicio 2019.

La ratio de solvencia de la entidad es del 20,65, un 10,77% más de lo que exige el Banco de España. Igualmente, su liquidez es de 2.095 millones, es decir del 469%, 4,6 veces más del mínimo legal que es del 100%.

Caja Rural del Sur -cuyo histórico presidente José Luis García-Palacios falleció el pasado noviembre durante un acto de la Fundación y en febrero fue distinguido con la Medalla de Andalucía a título póstumo- cuenta en total con 316 oficinas distribuidas entre Sevilla (124), Huelva (64), Cádiz (44), Córdoba (71), Málaga (13) y el agente cooperativa de Porcuna en Jaén, además de 412 cajeros. Su plantilla es de un millar de empleados que dan servicio a 678.581 clientes y 136.676 socios de esta cooperativa de crédito, que forma parte del Grupo Caja Rural con otras entidades del país.

Sus actuales responsables destacan que es la única entidad andaluza con sede central en Sevilla y su cuota en el mercado financiero español se sitúa entre el 7 y el 8% siendo "netamente provada"y sin haber recibido en 2018 "ni un céntimo de ayuda pública".

Apuesta por el territorio en el que se ubica por lo que "no hemos cerrado ni una oficina"aunque sí concentrado algunas con un sólo empleado en municipios de menos de 300 habitantes en localidades cercanas si bien en este sentido, Téllez hizo un llamamiento a las administraciones públicas para que "nos tengan un poco en cuenta"ya que pese a esa responsabilidad con el territorio "cuando se producen subastas financieras las entidades de aquó nos quedamos detrás"o cuando trasladan oficinas "nos llaman los alcaldes de los pueblos para que las dejemos pero los ayuntamientos no son clientes nuestros".

Aunque sin dejar el sector de las empresas agroalimentarias y particulares, uno de sus principales clientes, Caja Rural apuesta en el futuro por abrir su mercado a las "pymes y sobre todo a los autónomos"que están concentrando sus depósitos en "cuatro o cinco entidades financiera y creemos que no es bueno".