Turismo

Casi todos contentos

La Razón
La RazónLa Razón

Éste parece ser el resultado que la Feria de Abril de 2018 ha tenido. Contentar a todos es algo de regímenes dictatoriales, como ha pasado hace pocos días en la asamblea cubana. El nuevo presidente ha sido elegido por el 99,8% de los diputados. Uno ha discrepado, así que supongo que al del voto negativo lo eligen mediante sorteo de obligado cumplimiento. Volviendo a la Feria, pocas críticas de los ciudadanos, al igual que de la parte política. Teniendo en cuenta que cada sevillano tenemos nuestra propia manera de ver la Feria, no deja de ser un logro. Los datos parecen incontestables: más aumento de visitantes, más enganches, los incidentes escasos y leves e incluso algunos estudios hablan de más mujeres con sus trajes de gitana. El tiempo se ha portado de forma razonable. Las lluvias apenas dieron guerra y la temperatura ideal. Siempre es preferible un ligero frío nocturno que soportar una especie de baño turco en las casetas durante el día. Parece que la Feria larga ha pasado el examen final con notable alto después de dos ediciones. En este punto es donde encuentro más reticencias. «Demasiados días», dicen algunos. Pero veo el argumento débil, salvo que sea una de esas personas, que las hay, que entra por la portada el viernes de la víspera para recorrer la ruta de los arroces, berzas y demás festejos que se organizan, y no sale hasta que los fuegos artificiales no han rematado los festejos. Y todavía apurará unas copitas de fin de fiesta, más las sevillanas penúltimas, que las últimas jamás. A los millones de personas que disfrutan de este espectáculo único se les brinda la oportunidad de organizar sus visitas con mayor comodidad. Si a lo anterior sumamos que nuestra principal fuente de ingresos, el turismo, sale claramente beneficiado, según los empresarios del sector, que son los que saben bien del asunto, lo dicho, casi todos contentos. Añadir que es para estar orgullosos. Una vez más se demuestra que en otras materias no ocupamos puestos relevantes, pero en algo tan esencial como la convivencia somos imbatibles.