Casi un 40% de los contratos de la Junta acaban en empresas no andaluzas

Mil millones en inversiones fueron a parar el pasado ejercicio a empresas con sede fuera de Andalucía. El resto, hasta los 1.625 millones consignados para obras públicas en la comunidad, fueron asumidOs por compañías de capital andaluz. Un porcentaje que supone algo más del 38% del total, según datos recabados por el Círculo de Empresas Andaluzas de la Construcción, Consultoría y Obra Pública (Ceacop). Sus fuentes son las adjudciaciones publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el de la Junta (BOJA) y los provinciales, así como los perfiles del contratante y las distintas plataformas de contratación de las administraciones públicas.

Los datos, analizados por administraciones, revelan la preferencia del Gobierno central por adjudicar sus obras a compañías de capital nacional: solo el 13,6% de las otorgadas en 2014 fueron ejecutadas por andaluzas, lo que supone 105 de los 772 millones consignados. Un porcentaje que se voltea si se atiende a las inversiones realizadas por parte de las diputaciones, que otorgaron el 81% de su presupuesto para obras a empresas de la región –106 millones de los 130 que disponía–. En caso de las administraciones locales y regionales, también se benefició en mayor medida a éstas. Los ayuntamientos dispusieron de 365 millones: 217 de ellos (59%) fueron ejecutados por empresas regionales. El resto de los fondos, 102 millones, salieron fuera de la comunidad.

La Junta, por su parte, benefició con 168 millones a compañías propias, mientras que otros 102 millones de euros (casi el 38%) fueron asumidos por nacionales.

Por ministerios, el mayor inversor, Fomento, apenas encargó el 10% de sus inversiones a compañías de construcción de capital andaluz: 59 millones de los 564 adjudicados en ese período. Otros cuatro ministerios –Agricultura, Interior, Educación, Cultura y Deporte, y Hacienda y Administraciones Públicas– apostaron mayoritariamente por empresas no andaluzas. Solo Defensa e Industria, Energía y Turismo –éste último con el 100% de su presupuesto para obras, cuatro millones de euros– se decantaron por las andaluzas.

El histórico elaborado por Ceacop desde el año 2001 corrobora la mínima repercusión que los fondos para infraestructuras del Ejecutivo central tienen sobre la economía de las compañías andaluzas. La mayor cota alcanzada porcentualmente fue en 2006, cuando recibieron el 30% de los fondos; el pasado ejercicio se situó como el mínimo histórico, al adjudicarse solo el 13,6% de los 772 millones destinados a Andalucía.

En cuanto a la Junta, también Fomento y Vivienda lideró el capítulo inversor, con el 34% del total: de los 93 millones consignados, las empresas andaluzas se hicieron con 59, el 63% del total. Cuatro consejerías –Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Hacienda y Administración Pública, Turismo y Comercio, y Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural–, sin embargo, primaron en sus adjudicaciones a compañías de fuera de la comunidad. Esta tendencia no siempre ha sido así, ya que entre 2002 y 2010, las cantidades se repartían de forma casi equitativa entre unas y otras. Desde 2011, cuando se produjo el primer gran descenso en las inversiones –pasando de 1.600 millones a menos de la mitad, 770–, las empresas andaluzas siempre han copado un mínimo del 62% de esos fondos, que han servido para mantener en cierta medida su actividad. El presidente de Ceacop, Francisco Fernández Olmo, lamentaba recientemente la brutal caída del sector que aglutina la organización, cuya consecuencia directa ha sido la destrucción de más de un tercio de las empresas que había antes de la crisis y la pérdida de 320.000 puestos de trabajo –el 64% de los existentes en 2007–.

El año pasado supuso un hito en cuanto a inversión pública, tras el bajón sufrido en los dos anteriores. En 2012 y 2013 no se alcanzaron los mil millones de euros (890 en el primero y 992 en el segundo), lo que supuso un descenso del 42% respecto a 2011, cuando el presupuesto para infraestructuras se quedó en unos exiguos 1.514 millones, casi la mitad de lo consignado solo un año antes. Entre 2006 y 2009, los Presupuestos para Andalucía se habían situado en torno a los cuatro mil millones, superándolos con creces incluso con los 4.566 de 2009 o los 4.640 de 2007, justo en el comienzo de la crisis económica.