El niño fallecido en una montería de Sevilla no se movió de su puesto, según dos testigos

El compañero de puesto del cazador investigado por homicidio imprudente testifica que para alcanzar al niño tuvo que salirse del sitio asignado y disparar en otra dirección a la fijada

Dos cazadores que participaron en la montería de Guillena (Sevilla) del pasado 19 de enero en la que falleció un menor de 4 años de un disparo, cuyo autor L.A.G., de unos 60 años, es investigado por homicidio imprudente, han ratificado este miércoles ante el juez que investiga el caso que ni el niño ni sus familiares se movieron del puesto número 2 que tenían asignado.

En la jornada de hoy han testificado ante el titular del Juzgado de Instrucción 16 tanto el compañero del puesto número 1 del cazador investigado como los que ocupaban el puesto número 3 que, según la abogada Rosario Serrano -personada como acusación particular en nombre de la familia del pequeño-, han declarado que desde su sitio veían el puesto contiguo y ni el niño ni sus familiares se salieron del mismo.

Por su parte, el compañero que compartía el puesto número 1 con el cazador investigado, un arquitecto de 60 años y nacionalidad argentina aunque afincado desde hace años en El Puerto de Santa María, ha declarado que no pudo ver si éste se movió y salió del puesto porque él estaba pendiente de las presas a las que apuntaba pero ha reconocido que para alcanzar a alguien en el puesto 2 debió salirse y apuntar en dirección contraria a la zona que tenía asignada, ya que en medio de ambos puestos había un cabezo.

Para Serrano, los testimonios de este miércoles vienen a corroborar que "todo apunta a un imprudencia grave" del cazador investigado y a confirmar el "correcto comportamiento"de la familia del menor fallecido y del pequeño.

El juez ha citado el viernes al organizador de la montería, a los encargados de asignar los distintos puestos a los participantes y a los realejos que manejan los perros que atrapan las presas.