CC OO negocia recortes más agresivos con la plantilla que con cargos directivos

Al sindicato CC OO que dirige Francisco Carbonero no lo rodea una burbuja y atraviesa dificultades económicas debido al desplome de las subvenciones públicas y a la caída de la filiación que ha provocado la crisis. Situación que ha derivado en un conflicto laboral, como demuestra el documento interno de la central en el que se resume «la mediación en el Sercla –sistema extrajudicial para intentar resolver desacuerdos de esa naturaleza–, respecto a la convocatoria de huelga por parte del Comité Intercentros». Un escrito, firmado por el secretario de Organización y Finanzas de la organización, el imputado Miguel Ángel Cubero, al que ha tenido acceso LA RAZÓN y que certifica el divorcio entre la dirección y los empleados.

La historia del desencuentro se remonta al mes de junio, cuando «la empresa comenzó a redactar un Plan de Optimización y Racionalización de los Recursos», explican fuentes del Comité Intercentros. «Al poco tiempo», prosiguen, «sufrimos el impago temporal de la nómina de verano, pero ese punto se solucionó».

Por entonces, se deslizó que la central se sumaría a los ajustes de plantilla que ya han llevado a cabo organizaciones similares como UGT en la comunidad, e incluso se llegó a afirmar que CC OO preparaba un expediente de regulación de empleo (ERE) para 2013. Una medida que, según las mismas fuentes, «de momento está aparcada» y cuyo alcance es hoy un misterio para la plantilla, conformada, a diciembre del año pasado, por 477 personas.

Desde el Comité siguen desembrollando la madeja. «Lo que se ha planteado realmente hasta ahora –aseveran– es un convenio colectivo a la baja», lo que podría suponer una poda salarial «cercana al 15 por ciento y es, sin duda, una involución de derechos para los trabajadores». La medida podría no tener las mismas consecuencias para todos. ¿Por qué?

Según ha podido saber este periódico, los salarios de la plantilla no son «excesivos». Un técnico superior puede cobrar alrededor de 1.700 euros. Los miembros de la dirección sindical y los designados en los procesos congresuales, es decir, los cargos electos, están excluidos de las tablas salariales del convenio y aunque sufrirán los recortes, los consignados en el plan de optimización son menores.

Con todo, el 30 de noviembre se celebró la primera reunión para abordar el asunto. «Justo el mismo día en el que se entregaron cartas de despido a 26 compañeros indefinidos, cuyos puestos estaban sujetos a programas, con una antigüedad en la empresa de 8 a 10 años, alegando falta de financiación para estos planes», lamentan. Entre los afectados, cinco delegados sindicales, confirman los representantes del personal, que dudan del motivo esgrimido y apuntan otro: «La contratación de gente de un perfil distinto».

Al margen de esos primeros despidos, fuentes del Comité vuelven al convenio para apuntar que, pese a que «siempre se ha negociado», en estos momentos está en peligro «la cláusula de retroactividad, la ultraactividad». Temen que CC OO haga uso de la reforma laboral para remitir «al personal a los acuerdos sectoriales o al Estatuto de los Trabajadores, si pasado un año no se ha llegado a un pacto».

Aseguran ser conscientes de la coyuntura económica y tener «voluntad de negociar, e incluso de asumir sacrificios». «Pero queremos –matizan– que se nos escuche». «La empresa de manera unilateral lo ha decidido todo», critican. Una actitud que ha provocado que se hayan convocado por primera vez en la historia del sindicato, protestas organizadas en todo el territorio andaluz, en concreto, paros de dos horas los días 12, 14 y 18 de este mes. De hecho, no se descartan nuevas acciones en el futuro.

De momento, «la situación es muy violenta para los trabajadores», declaran fuentes del Comité, y se explican: «Se están aplicando discursos distintos a los que se defienden en la calle. Pedimos coherencia y que se retome el proyecto originario de CC OO», lanzan. Recuerdan que quienes «imponen las fórmulas –los dirigentes–son los responsables de esta situación» y reclaman «flexibilidad» en las negociaciones.

... Y los dos sindicatos se echan a la calle

Mientras los trabajadores de CC OO dan por hecho que el sindicato utilizará la reforma laboral en su reajuste de personal –pese a que Francisco Carbonero calificó esa posibilidad de «leyenda urbana»–, las consignas en la calle no cesarán. CC OO-A y UGT-A se manifestarán hoy en todas las capitales andaluzas en una jornada de movilización nacional en defensa de las pensiones y contra las tasas judiciales que se celebrará en toda España. A estas jornadas acudirán, en Sevilla, los secretarios generales de ambas organizaciones, el propio Carbonero y Manuel Pastrana.