Dos millones para una casa en El Rocío y 600 euros por hacer la romería con bueyes

De aquellas políticas, estos lodos. La economía rozaba su punto más álgido, tocaba techo justo antes de este largo viaje al suelo en el que el país se haya inmerso. En noviembre de 2006, en los tiempos en que los partidos políticos prometían el «pleno empleo», el Ayuntamiento de Gines se gastó 1,8 millones de euros en una casa en El Rocío, a pocos meses de las elecciones, que coincidían con la romería. El siguiente Gobierno, de diferente signo, anunció subvenciones de 600 euros por ir a la ermita con bueyes.

Gobernaba el popular Francisco González Cabrera, que invirtió cerca de dos millones en comprar una casa en una de las mejores zonas de la aldea almonteña, en la calle de Las Hermandades. El Ayuntamiento adujo que aumentaba así, en un municipio de larga tradición rociera, su «obra social». Se trataba de un inmueble de reciente construcción, de 300 metros, 19 habitaciones de diferente capacidad y otros tantos aseos, un salón amplio, un patio, otros dos cuartos de baño comunitarios, cocina, salón y porche. Todo ello a 500 metros de la ermita de la Blanca Paloma y más cerca aún de la Casa Hermandad de Gines.

El Consistorio aseguró que la inversión no salió de los impuestos sino del superávit de la empresa municipal Sodegines. El Ayuntamiento señaló que se convertiría en una casa rural para los vecinos, con precios más reducidos que los del mercado, que se regularían en una ordenanza. La casa permaneció cerrada y sin uso hasta 2008. El Ayuntamiento intentó venderla, sin éxito, poco después de su adquisición, aludiendo a que la hermandad matriz no vio la operación con buenos ojos. Dos años después de la compra, el Consistorio alquiló la casa de El Rocío por 28.000 euros anuales. Posteriormente, demandó a los inquilinos por impago, una familia a la que se le arrendó la propiedad por cinco años con la idea de convertirlo en hotel rural invirtiendo 100.000 euros más para adecuarlo. Los vecinos de Gines gozarían de un 20% de descuento en el alojamiento, menos en época de romería y en la Candelaria. Aparte, Sodegines destinó 723.000 euros a una planta fotovoltaica, junto a la A-49, construida en parte en zona verde y sin funcionar desde 2010. Ahora, en los tiempos del estallido del globo inmobiliario, la Sociedad de Desarrollo Local de Gines se encuentra en concurso de acreedores, desde 2011, con una deuda de ocho millones. La compra de un terreno en término municipal ajeno tiene precedentes en otros municipios como La Rinconada, que adquirió una parcela a medias con un promotor en Chipiona.

Con el cambio de Gobierno tras los comicios y el PSOE e IU en el Ayuntamiento, en 2008, el Consistorio anunció subvenciones de 600 euros para las familias de Gines que fueran a El Rocío con bueyes con el objetivo de «fomentar esta tradición». La lluvia de críticas llevó al Consistorio a matizar la ayuda y pasó la «patata caliente» a la Hermandad del Rocío de Gines, argumentando que sería ésta la que financiaría parte del elevado coste de la ayuda.

Por el contrario, Gines adolece de una biblioteca y una Casa de la Cultura, con las obras paradas durante mucho tiempo. El actual regidor aludió a que «el fondo que la sociedad municipal tenía para ello se desvió por el anterior Gobierno» para comprar la casa en El Rocío. No muy lejos, en Burguillos, el Consistorio se ha declarado en quiebra. Allí, el Ayuntamiento no se planteó, que se sepa, una casa en El Rocío, sino todo un proyecto de aeropuerto por 60 millones.