Política

Sucesos

El cómplice del crimen de la bebé de 16 meses debía estar en prisión

Tenía una condena firme por maltrato

El presunto cómplice del crimen de Almería, Raúl Ríos
El presunto cómplice del crimen de Almería, Raúl Ríoslarazon

La historia vuelve a repetirse. El imputado por el crimen de la niña onubense de 16 meses Raúl Ríos Forte y presunto cómplice del principal implicado en el rapto y crimen, Jonathan Moya, tiene pendiente de cumplimiento desde noviembre de 2011 una pena firme de dos años y tres meses de prisión por maltratar a su compañera sentimental, menor de edad. El caso guarda paralelismo con el asesinato de Mari Luz Cortés. Hay que recordar que Santiago Del Valle, condenado a 22 años de prisión por la muerte de la menor onubense, también tenía pendiente una condena que no ejecutó un juzgado de Sevilla.

Fuentes judiciales indicaron a Europa Press que Raúl Ríos, de 25 años, fue condenado por el juzgado de lo Penal número 4 de Almería por delitos de violencia psíquica y física habitual sobre la mujer y de lesiones, por los que se le impusieron penas de un año y nueve meses de cárcel y seis meses de prisión, respectivamente.

Pese a que recurrió en apelación ante la Audiencia Provincial, el fallo dictado el 20 de octubre de 2011 fue confirmado en todos sus extremos, por lo que, según precisaron las mismas fuentes, se debería haber procedido a dictar ejecutoria para su ingreso en el centro penitenciario provincial de El Acebuche.

Según la sentencia, Raúl Ríos sometió a su novia, de tan solo 15 años de edad, durante un año y medio de relación a «frecuentes» agresiones físicas y verbales en las que le propinó «puñetazos en la barriga y bofetadas», al tiempo que se dirigía a ella en términos vejatorios y con insultos. Además, controlaba «su forma de vestir y la relación con sus amigas».

Al Ríos, en prisión provisional comunicada y sin fianza por el asesinato de la bebé Miriam desde el pasado día 29, le consta además otra condena en firme previa por agredir de «forma brutal» a un joven en el interior de una discoteca de la capital almeriense de madrugada. En este caso, el Juzgado de lo Penal número 1 le condenó en 2010 a la pena de seis meses de cárcel y al pago de 4.000 euros a la víctima por las lesiones causadas.