El PSOE bloquea de nuevo el avance de la comisión parlamentaria de formación

Se opone a que se acuerden y se inicien ya las comparecencias, un desfile que la oposición quiere que incluya a Susana Díaz

Para la oposición, la comisión creada en el Parlamento andaluz con el fin de investigar el presunto fraude en los cursos de formación subvencionados por la Junta es, de momento, como una manta corta que no satisface a quien la usa. El órgano, en el que están representados PSOE, PP, Podemos, Ciudadanos (C’s) e IU, se constituyó el 1 de octubre y ayer celebró su primera reunión del año, tras un parón provocado por las elecciones generales del 20D y las Navidades.

El encuentro, presidido por el presidente de la Cámara, el socialista Juan Pablo Durán, se saldó en unos 45 minutos y sirvió para avanzar poco. En su arranque, la comisión fijó un plan de trabajo dividido en tres fases: una primera de consulta de la documentación que proporciona el Gobierno andaluz, otra de comparecencias de los implicados que los Grupos elijan por mayoría, y una última en la que se llegará a conclusiones y se intentará emitir un dictamen final –la comisión que se creó en torno a los ERE se cerró sin éste–. Meses después los partidos no han logrado pasar de la primera etapa. De hecho, ahora se ha aprobado una resolución que marca cómo tratar los expedientes, después de que el PP o Podemos se quejaran públicamente de la imposibilidad de manejar la ingente información a revisar sólo con un boli y papel.

Preguntado sobre qué normas establece dicho protocolo, el diputado de Ciudadanos que preside la comisión, Julio Díaz, apuntó, al término de la cita, que habida cuenta de que el ente tiene carácter «secreto», el acceso a la documentación «implica una responsabilidad», por lo que se ha regulado la forma de obtener un documento, realizar copia de él y devolverlo a la sala de la institución en la que están siendo custodiados. De acuerdo a lo pactado, la demanda de la reproducción de papeles se efectuará por escrito ante el funcionario de los servicios jurídicos de la institución, quien anotará el contenido de la petición y expedirá el correspondiente recibí. Y de vuelta, también la devolución.

Al margen del reglamento para hacer fotocopias, ¿se abordó alguna otra cuestión? No, con matices. PP, Podemos, Ciudadanos e IU se mostraron partidarios de que comiencen ya las comparecencias en la comisión de investigación, pero para el PSOE esto puede ser «precipitado», según confirmaron a LA RAZÓN fuentes presentes en la sesión de trabajo. Los socialistas creen que por ahora hay que centrarse en el estudio de la documentación. Tras el nuevo desencuentro, Julio Díaz adelantó que volverá a convocar a los Grupos el martes 19 de enero para «pulsar su opinión» otra vez sobre la posibilidad de entrar en la fase de plantear de forma oficial las solicitudes de los llamados a desfilar por la Cámara, porque cree que es posible simultanear las fases uno y dos. Varios partidos ya han adelantado su intención de incluir en la lista de convocados a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, lo que la colocaría en el escaparate en un tiempo en el que el PSOE vive una crisis interna a raíz de los resultados del 20D y de que muchas miradas están posadas en ella.

De momento, el bloqueo originó una cascada de reacciones. De «vergüenza y surrealista», lo tildó la diputada del PP andaluz Teresa Ruiz-Sillero. Es más, tras mostrarse convencida de que existe una «mano negra» para obstaculizar el normal funcionamiento de la comisión, la popular no dudó en acusar a Susana Díaz, de ser quien ordena que los archivos no traspasen los límites del Parlamento, por lo que instó a la Cámara a notificar dicha queja. «Su comportamiento es peor que el de Chaves y Griñán en la comisión de los ERE», lanzó.

De otro lado, el parlamentario de Podemos, Juan Ignacio Moreno Yagüe, defendió que la «clave» de la comisión es que «falta mucha documentación» que la Junta no facilita. «En algún momento este Parlamento tiene que decir al Gobierno que somos iguales y que empieza a mandarme datos» con la vista puesta en las comparecencias. «Le hemos manifestado al presidente que le damos el visto bueno al reglamento con la esperanza, ansia e ilusión de que podamos empezar a trabajar cuanto antes», ironizó Juan Antonio Castro, representante de IU.