Andalucía

Investigan a 66 personas por su presunta implicación en incendios

La Guardia Civil ha esclarecido 120 de los 355 registrados en Andalucía en 2019

Imagen de un incendio en Almonastre la Real / Foto: EP
Imagen de un incendio en Almonastre la Real / Foto: EPlarazon

La Guardia Civil ha esclarecido 120 de los 355 registrados en Andalucía en 2019

La Guardia Civil ha procedido a la investigación de 66 personas por su presunta implicación en algunos de los 355 incendios forestales y conatos declarados en Andalucía en 2019, tras esclarecer el origen de 120, el 95% causados por la acción del hombre. En concreto, un total de 64 han sido provocados por negligencias, lo que supone un 53,3%, mientras que 39 fueron causados de forma fortuita o accidental, lo que representa el 32,5%, seis por causas naturales (5%) y once de forma intencionada (9,2%), según los datos aportados por la Guardia Civil y cerrados del 1 de enero al 1 de agosto. La Benemérita precisa que, además de los 66 personas imputadas por su implicación en los incendios, ha interpuesto seis infracciones administrativas.

El balance de Andalucía no difiere del realizado a nivel nacional, ya que la Guardia Civil señala, en una nota de prensa conjunta con Protección Civil, que en los primeros seis meses de este año el factor humano está detrás de más del 98% de los siniestros esclarecidos. Asimismo, resalta que el número de detenidos o investigados ha aumentado este año en un 90% en España, con un total de 178 personas consideradas autoras de los mismos, una cifra que casi duplica a los 95 detenidos e investigados del pasado año. Los datos se agravan si se analizan los primeros cinco meses, franja de tiempo en la que el número de delitos de incendios forestales ha aumentado en un 140% respecto al mismo periodo de 2018. Durante los seis primeros meses, ha crecido en un 136%.

Los fuegos en Doñana

Por su parte, Ecologistas en Acción denunció ayer la impunidad de los incendios que cada verano se producen en el encauzamiento del río Guadiamar, en la zona conocida como Entremuros, protegida además de formar parte del Espacio Natural Doñana por su rica diversidad de aves y anunció que llevará el asunto a la Fiscalía. La organización apuntó que los incendios «provocados» en este punto vienen sucediéndose cada período estival con «el conocimiento de las administraciones» y, sin embargo, «no hay información sobre los incendiarios, ni las penas o sanciones impuestas, los terrenos afectados o la valoración económica de sus efectos». El último de estos siniestros se produjo el pasado jueves en el Vado de los Vaqueros.

Miembros de Ecologistas en Acción que se encontraban cerca del lugar, alertados por la altura de las llamas asistieron a la propagación de un incendio que “acabó con los fresnos, tarajes y carrizos a lo largo de las márgenes del río Guadiamar en su encauzamiento, quemando la vegetación de ribera y numerosos nidos y refugios de las aves que pueblan y se alimentan en la zona, como fochas comunes, calamones, ánades, garzas, carriceros y aguilucho lagunero entre otras”.

La organización ha asegurado que “desconoce los improbables beneficios de prender fuego a Doñana y las dudosas razones que los incendiarios tienen para quemar una zona de tan alto valor ecológico, pero no hay razón que justifique poner de nuevo en riesgo de incendio al Espacio Natural Doñana, puesto que no hay control alguno sobre el fuego, ni el uso del fuego en la naturaleza como amenaza o herramienta para cualquier objetivo”.

Ademas, recuerda que en 1998 la rotura de la presa de lodos tóxicos de la mina de Aznalcóllar, que provocó la mayor catástrofe ambiental ocurrida en Andalucía, afectó a esta zona de Entremuros, que hoy estaba recuperada y generando una importante actividad económica para la comarca, aprovechando el potencial de las aves para el fomento del turismo ornitológico.