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La ampliación del metro de Málaga al Civil acaba en los tribunales

El ayuntamiento, a la espera de un nuevo Gobierno andaluz, reclama también la suspensión cautelar de la ejecución de los actos administrativos

Juanma Moreno ha anunciado que si llega a la Presidencia de la Junta soterrará el tramo al Civil como pide el Ayuntamiento
Juanma Moreno ha anunciado que si llega a la Presidencia de la Junta soterrará el tramo al Civil como pide el Ayuntamientolarazon

La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Málaga aprobó ayer la impugnación en vía contencioso-administrativa del acuerdo del 16 de octubre de 2018 del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, sobre la autorización del gasto y la celebración del contrato por la Agencia de Obra Pública para ejecutar las obras de prolongación de la línea 2 del metro de Málaga, tramo Guadalmedina-Hospital Civil.

El ejecutivo local informó al respecto de que la decisión se adopta en base a los informes emitidos por técnicos municipales de las áreas de Ordenación del Territorio, Accesibilidad y Movilidad, «que habían sido puestos en conocimiento del gobierno andaluz sin que desde entonces se haya producido respuesta o rectificación alguna».

Además de la impugnación, se aprobó en el citado órgano de carácter municipal solicitar que se incluya la suspensión cautelar de la ejecución de los actos administrativos.

El Consistorio malagueño da el paso ahora una vez que se ha aprobado –el pasado 13 de febrero en Junta de Gobierno Local– solicitar a la Junta de Andalucía la anulación del proyecto de construcción del referido tramo de metro en superficie y habiéndose producido con posterioridad y pese a esto, la aprobación por parte de la Junta de la autorización del gasto y la celebración del contrato hasta un importe de 34.238.737,21 euros.

El equipo de gobierno del Partido Popular no considera un proyecto completo el documento aprobado por la Junta andaluza, en el sentido de lo expresado en el artículo 125 del reglamento general de la Ley de Contratos del Sector Público, «al no haber contemplado las obras de urbanización necesarias para que las calles que el proyecto de la plataforma tranviaria deja en fondo de saco puedan mantener la funcionalidad y el acceso de los servicios básicos y de emergencias».

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, confió en que la medida suponga «que no haya adjudicación, para evitar que haya terceros afectados», e incidió al respecto en que «ahora que se abre un escenario político nuevo es el momento de una reflexión más amplia pensando en el bien común».

No en vano, el candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ya avanzó el pasado miércoles en Málaga su propósito de que un nuevo gobierno «termine de una vez las líneas 1 y 2 del metro de Málaga, porque ya está bien de que nos tomen el pelo» y advirtió de que el tramo al Civil «lo vamos a soterrar».