Sevilla

La búsqueda de la ballena blanca laboral: el sueño de Moby Dick a través de la FP

El IES La Rinconada es pionero en España del curso de Estructuras e Instalación de Sistemas Aeronáuticos en la formación profesional, con el apoyo de empresas como Airbus

Ángel Gallardo, Samantha Álvarez y Carlos Zafra, alumnos de la primera promoción del módulo que se imparte en un instituto de Sevilla / Manuel Olmedo
Ángel Gallardo, Samantha Álvarez y Carlos Zafra, alumnos de la primera promoción del módulo que se imparte en un instituto de Sevilla / Manuel Olmedolarazon

El IES La Rinconada es pionero en España del curso de Estructuras e Instalación de Sistemas Aeronáuticos en la formación profesional, con el apoyo de empresas como Airbus

El surco que deja en el cielo de Sevilla el A400M rememora a las ondas marítimas del Moby Dick de Mellville en pleno océano. El piercing de Samantha Álvarez Bellido, residente en La Rinconada (Sevilla), 19 años, nacida en Ecuador, subraya la mirada de Capitán Ahab a la caza de un anhelo «laboral». «Trabajar especializada en una profesión». «Tenía dos sueños: ser policía y la aeronáutica», repasa tras recordar que está «aquí gracias a mis padres que me trajeron de Ecuador con dos años» a la búsqueda –la caza, diría Melville– de un futuro mejor. Samantha es la única mujer de la primera promoción del IES La Rinconada del Grado Medio orientado a la formación en materia aeronáutica, consistente en «Estructuras e Instalación de Sistemas Aeronáuticos», una formacióm pionera en España. Carlos Zafra Barbero (Dos Hermanas, 19 años), alumno también del segundo curso del módulo, señala que en la FP ha encontrado «la motivación» porque le gusta «el trabajo bien hecho» y la parte práctica. Carlos, de hecho, salió «de Erasmus» a Italia, donde vio «necesidades que aquí no tienes» y adquirió «madurez y soltura». Ángel Gallardo García, de 29 años, era «mecánico de vehículos» y, tras unos cursos previos, se decantó por la instalación de sistemas aeronáuticos, previa recomendación «de un amigo». Son tres de los 20 alumnos del módulo, reivindicativos –«queremos ir a ver más empresas para saber cómo se trabaja»– y «orgullosos», apunta Roberto Medina, uno de los profesores del taller que «entre todos» montaron de cero, al que Airbus dota de materiales. Junto a él dan clase José Joaquín Díaz, Miguel Barrero, Zenaida González y José García Redondo. El nivel del curso, señala el vicedirector Eulogio García, «es medio-alto, tanto de implicación como de estudios» y «las expectativas son buenas» por «el interés del sector». La FP «es muy finalista y se adapta más a las empresas». De hecho, «el abandono escolar es cero». «En vacaciones echamos de menor el taller», apunta Samantha. En el sector, «no hay nada similar reglado». La meta es un trabajo de calidad pero «el camino en sí ya es una meta». En una tierra con en torno al 40% de desempleo juvenil, un avión surcando los cielos es más hermoso que la Victoria de Samotracia. Marinetti reinventado. La ingravidez del A400 enlaza directamente con los sueños del mañana y con la gravedad del mercado laboral.

Una apuesta por la “formación profesional y personal”

«Cuando tienes una determinada posición, tienes una responsabilidad social», señala Antonio Lasaga (Huelva, 1973), director de Recursos Humanos de Airbus en España. «Las empresas somos las primeras que percibimos las necesidades de nuestros trabajadores. Somos los más indicados para hacer saber las necesidades educativas que tenemos», señala Lasaga, andaluz al frente de una de las empresas más importantes del mundo. Reivindica «la Formación Profesional dual». En los módulos existentes en La Rinconada y Puerto Real «entra sólo el 20% de los estudiantes que lo han escogido como opción principal», explica a LA RAZÓN. La media de la FP en España es «del 24% de los jóvenes» cuando en Francia y Alemania es del «45-50%». Empresas como Airbus realizan «una labor importante de soporte de medios materiales, de información y de formación de formadores», explica. La FP «es una línea estratégica», más aún en el sector aeroespacial, que ha firmado un memorando de apoyo de lo que supone «un círculo virtuoso»: «Una FP que forme como profesional y como persona para afrontar retos, donde entran la digitalización, los idiomas y las habilidades interpersonales».