Andalucía

La Junta permite a los padres dar por finalizado el curso

Ni 72 horas después de emitir unas inútiles recomendaciones por la ola de calor, la Consejería de Educación admite los «problemas de climatización» de los colegios y justifica la falta de asistencia del alumnado

La plataforma «Escuela de calor» llevó sus reivindicaciones al Parlamento hace ya doce días
La plataforma «Escuela de calor» llevó sus reivindicaciones al Parlamento hace ya doce díaslarazon

Hoy se esperan 42ºC de máxima en Sevilla, 41ºC en Córdoba... La ola de calor seguirá castigando a Andalucía esta semana, la última del curso escolar. Sobre todo en puntos del interior las temperaturas se acercarán mucho a los 40ºC hasta el viernes. Esto significa que a las diez de la mañana el termómetro marcará bastante más de los 27ºC que la normativa –Real Decreto 486 de 1997 sobre seguridad y salud en los puestos de trabajo– fija como límite en un centro de trabajo. Los colegios andaluces, en su gran mayoría, carecen de sistemas de climatización idóneos. Vómitos, mareos, indisposiciones e incluso desmayos se han sucedido en muchos centros educativos en los últimos días. Una situación insostenible que la Consejería de Educación, reticente durante semanas a reconocer su gravedad, zanjó ayer accediendo a dar por finalizado el curso escolar, una petición que tanto padres como profesorado –a través de los sindicatos CGT y CC OO– habían formulado previamente a la nueva consejera del ramo, Sonia Gaya.

El pasado jueves la administración emitía una circular, de la que hasta el viernes muchos centros no tuvieron conocimiento, en la que calificaba de «excepcional» la ola de calor que sufre la comunidad y remitía recomendaciones a los centros como potenciar la hidratación, reducir la actividad física o traslados a espacios más frescos y a los padres vestir a sus hijos con «ropa adecuada a las altas temperaturas». Además, Educación trasladaba la intención de realizar un «análisis con rigor» de las condiciones de cada centro, pese a que las protestas se vienen repitiendo año tras año.

«Sobrecalentamiento»

Sea como fuere, y ante el evidente riesgo para la salud, denunciado por sindicatos, asociaciones de padres, partidos políticos y la sociedad en general, la Dirección General de Ordenación Educativa libró a media tarde una segunda circular en la que comunicaba a los centros que, dada la situación excepcional de ola de calor, se considerará «justificada» la falta de asistencia del alumnado al centro durante los días que restan para la finalización del periodo lectivo ordinario, siempre que haya sido comunicada por la familia del alumno.

En pos de «garantizar el bienestar del alumnado», la Junta opta por esta decisión y esgrime que la prolongada ola de calor esta provocando un «sobrecalentamiento» en los edificios escolares.

El departamento que encabeza Sonia Gaya recurre al «principio de autonomía organizativa» de los centros para que estos puedan «flexibilizar el horario». Así, hasta la finalización del periodo lectivo ordinario, los centros docentes permitirán la salida del alumnado del centro a requerimiento de las familias, de acuerdo con la organización previa y los horarios de salida que se establezcan por el centro a estos efectos.

De las medidas organizativas adoptadas por el centro docente se informará al Consejo Escolar y, especialmente, a las familias mediante los procedimientos y cauces contemplados en el correspondiente plan de centro.

En todo caso, con independencia de las medidas organizativas adoptadas por el centro docente, «quedará garantizado el cumplimiento del horario general del centro, la evaluación del alumnado y la prestación de los servicios complementarios», culmina el oficio de Educación.

La incidencia académica de la medida es mínima –las notas ya están puestas y en las edades más tempranas tienen lugar las fiestas de fin de curso, teatros, actuaciones...– y con ella la Junta trata de lavarse las manos ante cualquier contingencia desgraciada que derive en una responsabilidad de índole legal superior. El aire acondicionado ha pasado de «no aconsejable» a provocar, por su ausencia, un fin de curso precipitado y caótico, pues deja en manos de los padres la decisión final.

Aluvión de Inspecciones

CC OO anunció que sus delegados de prevención iniciarán reclamaciones urgentes ante la Inspección de Trabajo. La normativa actual refleja que los reiterados 27ºC no deben superarse en las aulas, pero tampoco en oficinas, talleres, pasillos, comedores y resto de instalaciones. El sindicato demanda un plan integral de renovación y adaptación de instalaciones de los colegios, pues los «episodios de calor no son una eventualidad». «Si una nevada o inundación obliga al cierre de aulas, una ola de calor es motivo para paralizar las clases mientras no se realicen las adaptaciones necesarias», según el sindicato.

Desde diferentes Ayuntamientos se ha optado por paliar los efectos del calor. El Consistorio de Armilla, por ejemplo, facilita en las horas de temperaturas más altas el acceso a la piscina municipal al alumnado de los cuatro centros educativos, con la intención de no alterar el horario escolar y favorecer la conciliación familiar y laboral.

La plataforma de AMPA de Sevilla «Escuelas de calor» sigue adelante con sus reivindicaciones y la próxima semana tiene previsto reunirse con los partidos políticos presentes en el Parlamento la próxima semana en un colegio de la provincia.