Arquitectura

La Junta y La Caixa no ceden a las presiones de los conservacionistas

La Fundación mantiene la amenaza de los tribunales que podría paralizar el proyecto

La Razón
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«No se perderá la inversión de La Caixa». Juan Espadas tiene claro que Sevilla no se puede permitir la pérdida de una inversión de diez millones de euros que pongan en valor la Reales Atarazanas. El alcalde hispalense se reunió con la consejera de Cultura, Rosa Aguilar, y con representantes de La Caixa para tranquilizarlos. Sí, el Ayuntamiento abrirá a la ciudadanía el proyecto para que sea conocido, pero no reculará a las presiones de los conservacionistas, que continúan amenazando con los tribunales y paralizar un proyecto que entienden que no se adecúa a lo que el monumento –prácticamente siglos olvidado– merece.

Se trata, por tanto, de «abrir un periodo de participación y de difusión para que se conozca mejor el proyecto», pero sin renunciar a un proyecto que ha pasado todos los trámites burocráticos y que incluso tiene licencia de obras concedida por el Consistorio. Porque la Junta de Andalucía asegura que la conservación de las Atarazanas «está garantizada» con el trabajo del arquitecto Vázquez Consuegra.

En la reunión mantenida ayer por el secretario general de Cultura, Eduardo Tamarit, con la Fundación Atarazanas, en la que ha estado acompañado de los representantes de La Caixa, de la Fundación Cajasol y del arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra se expusieron los detalles del proyecto. La consejería recordó que no se presentaron propuestas alternativas al proyecto final durante el período de exposición a información pública. Asimismo, una vez adjudicada la concesión de las Reales Atarazanas por parte de la Consejería de Cultura a La Caixa, el proyecto fue presentado públicamente el 19 de diciembre de 2014 en un acto en el que estuvieron presentes representantes de la Fundación Atarazanas.

Cultura señaló que en la reunión «ha quedado clarificado que no se trata de una actuación irreversible», y que el proyecto arquitectónico «protege» el monumento garantizando su conservación y lo pone en valor con su apertura a la ciudadanía.

Fundación Atarazanas aseguró que la reunión fue tensa y anunció que intentará elevar los acuerdos del pleno municipal al Parlamento y ante la «cerrazón» de los promotores, continuará con las acciones legales pertinentes.