Andalucía

La Unesco pone la lupa en el uso ilegal del agua en Doñana

Vigilará la gestión de este recurso durante los dos próximos años al considerar que es el «principal problema» del espacio natural

WWF expuso ante la Unesco su «profunda preocupación» sobre el estado de conservación de Doñana / Foto: La Razón
WWF expuso ante la Unesco su «profunda preocupación» sobre el estado de conservación de Doñana / Foto: La Razónlarazon

Vigilará la gestión de este recurso durante los dos próximos años al considerar que es el «principal problema» del espacio natural

La Unesco decidió ayer, durante la sesión número 43 del Comité del Patrimonio Mundial de la Humanidad en Baku (Azerbaiyán), vigilar el uso ilegal del agua en Doñana y su entorno durante los dos próximos años, al considerarlo el principal problema para conservar la integridad del espacio natural. Según informó WWF, que está participando como observador en este encuentro donde se evalúa la gestión y el estado de conservación de los Lugares Patrimonio Mundial de la Humanidad, se vigilará la gestión y planificación de este recurso y evaluará su impacto en la biodiversidad.

El organismo internacional se ha comprometido, además, a seguir de cerca el proceso por el que la Comisión Europea ha llevado a España al Tribunal de Justicia de la Unión Europea por la degradación del humedal de Doñana y la pérdida de biodiversidad. Asimismo, ha recordado que los proyectos vinculados a un posible trasvase deben contemplar los impactos sobre los Valores Universales Excepcionales (UVE) por los que Doñana fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad.

Durante la reunión, WWF expresó su profunda preocupación por el estado de Doñana y recordó que este espacio no puede seguir siendo un ejemplo mundial de impunidad en uso ilegal de agua y suelo debido a la presión insostenible de sector agrícola.

«La Unesco debe recordar al Estado español su obligación de realizar urgentemente una gestión ambiciosa del agua para garantizar la recuperación de su acuífero y aumentar su resiliencia frente al cambio climático», reclamó Teresa Gil, responsable del Programa de Agua de WWF España.

Para la organización ecologista, esta gestión «ambiciosa» debe «contemplar el cierre de todos los pozos, balsas y fincas ilegales y buscar alternativas diferentes al trasvase de agua».

Asimismo, WWF alertó sobre el escenario de inseguridad e inestabilidad al que se enfrenta Doñana, en los próximos años, debido a la posición del nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía, que «respalda públicamente el incremento de la agricultura intensiva y la modificación del Plan de la Corona Norte de Doñana para legalizar de facto la superficie de regadío ilegal».

WWF advirtió de que el Plan de la Corona Norte de Doñana fue consensuado con todos los sectores implicados y aprobado en el año 2014 y que cualquier modificación unilateral del mismo supondría «la ruptura unilateral de las reglas del juego acordadas entre todos los sectores y un fuerte impacto para la imagen de las fresas de Doñana en los mercados europeos».